Esta semana vamos a conocer un proyecto pionero de huertos urbanos para desempleados. Porque hay personas que luchan pror cambiar su presente, aportando ideas y creando ilusiones que son reales y factibles. En nuestro país hay muchas tierras abandonadas que no producen nada, mientras que importamos cantidades ingentes de verduras del exterior. Por eso, un grupo de hombres y mujeres han propuesto trabajar esas tierras, primero para autoabastecerse en muchos casos dada la dramática situación en la que viven pero con vistas a comercializar lo que resulte del campo, generar empleo y crear una red de huertos urbanos por todo el territorio. Todo empezó porque una mujer y madre se queda en paro y como conoce el campo decide poner en marcha esta iniciativa a la que ya se han sumado decenas de personas.
Asistimos a una reunión para conocer en primera persona en qué consiste el proyecto y allí descubrimos que en una barriada del polígono sur de Sevilla con un índice de paro que ronda el 80%, un grupo de parados han puesto en marcha algo parecido a pequeña escala. En el patio de un colegio han hecho unos huertos pequeñitos y han dejados precioso el espacio con mesas recicladas, jardineras y unos adornos florales que, de forma autodidacta, han aprendido a hacer. Son vecinos del barrio, ilusionados y orgullosos de ver cómo crecen las coles y las lechugas que además han hecho comunidad y , poco a poco, también llenan barrigas.