Ferrán Adriá ha revolucionado la comida en el mundo, pero el único título que le gusta es el de cocinero. El próximo día 30 de junio se cierra El Bulli, tal y como lo conocemos, para convertirlo en un centro de creatividad, porque, según dice Ferrán, "se ha acabado una etapa".
Su carrera en la gastronomía se inició por una sucesión de casualidades, cuando decidió a los 18 años, siendo estudiante de Ciencias Empresariales, trabajar como lavaplatos para costearse unas vacaciones.
El Bulli cambió su vida y se convirtió en un modo de vivir y hacer felíz a la gente, porque sabe que "la mayor parte de los momentos felices transcurren alrededor de una mesa".
Hablamos en Radio 5 con este artista de la cocina, que nos explica cómo él y su equipo han evolucionado hasta hoy (28/06/11).