Bonnie Raitt, la reina pelirroja

'Slipstream' es el primer disco de Bonnie Raitt en siete años, a la vez que supone la inauguración de su nueva compañía Redwing Records. El álbum es una mezcla de blues, rock, soul, e incluso toques de reggae como muestra del extraordinario eclecticismo de su protagonista. No resulta nada sencillo moverse por los caminos de la música tradicional, aunque la fluidez con la que Bonnie Raitt lo hace parece desmentirnos. Desde su primer trabajo, publicado allá por 1971, la artista de Burbank emergió como una de las grandes esperanzas de un estilo que ya había sido asimilado por muchos músicos de rock. Ella incorporaba una voz peculiar y una rara habilidad para tocar la guitarra con bottleneck. Pero también tenía un enorme sentido para acercarse a una audiencia mucho más amplia que se encontraba en los terrenos del pop. Por otro lado, el folk nunca le resultó extraño y fue aceptada sin problemas en aquella escena junto a compositores afines al Troubadour de Los Angeles. Nuestra invitada evolucionó de manera extraordinaria y se ha convertido en la reina pelirroja de la Americana music. Esta nueva lección magistral de la veterana artista californiana nos permite también deslizarnos por algunos de los momentos mágicos de una carrera ejemplar.