La asociación Garaldea se origina tras el encierro que llevaron a cabo en 2012 trabajadores y usuarios del ámbito de la drogodependencia en la finca El Batán de Chinchón cuando la Comunidad de Madrid decidió cerrar la comunidad terapéutica. Garaldea está formada por personas que han superado su adicción y por terapeutas, educadores y otros colaboradores. Todos juntos, sin jerarquías, trabajan y conviven en un espacio en que se ha creado un proyecto autogestionado que se sostiene con donativos de los miembros de la asociación y de los colectivos que utilizan los espacios, con una huerta ecológica y con la realización de talleres. A través del empoderamiento, la horizontalidad, el apoyo mutuo, la relación con el entorno y con otros colectivos, Garaldea persigue generar unas condiciones imprescindibles para una vida digna partiendo del convencimiento de que la transformación debe ser llevada a cabo por las propias personas interesadas.
- Géneros
- Servicio Público
- Idiomas
- Castellano