El comandante Manuel Rivera Sánchez, de 45 años, era natural de Viveros (Albacete). Estaba casado y tenía tres hijos. Ejercía como profesor en la Academia General Militar.
El día 30 de enero de 1987, poco después de las 8:00 horas, un etarra colocó una furgoneta bomba ante la iglesia de San Juan de los Panetes de Zaragoza. El objetivo era atentar contra un autobús que diariamente trasladaba personal docente y militar a la Academia General Militar.
El terrorista francés Henri Parot accionó la bomba a distancia. Fallecieron el comandante Manuel Rivera Sánchez y el conductor del autobús, el civil Ángel José Ramos Saavedra. Otros 27 militares y 15 viandantes resultaron heridos.
El etarra Parot fue condenado por el crimen y fue obligado a indemnizar a los herederos de Ángel Ramos, así como a la viuda de Manuel Rivera y a los heridos. Fue declarado insolvente, por lo que las indemnizaciones recayeron sobre el Estado. Los etarras Francisco Múgica Garmendia y José María Arregui Erostarbe fueron condenados a penas de 743 años de cárcel cada uno, como cooperadores, y a pagar una indemnización.
Véase también Ángel José Ramos Saavedra.