Que teman los demás a los españoles

• El Valencia dejó una buena impresión en Manchester
• El Barça, más fiel a su filosofía de cantera que nunca
• Los suplentes del Madrid superaron el trámite con nota

El francés del Real Madrid, Karim Benzema, celebra su tercer tanto al Auxerre.

Jornada exitosa de los equipos españoles, donde todos han conseguido sus objetivos, incluido el Valencia. ¿Por qué el Valencia si no ganó? Porque dejó una impresión de equipo capaz de asumir retos importantes en campos históricos, y eso le hace tener mucha confianza para los cruces.

Afrontó el partido ante el Manchester United con la intención sana y clara de conseguir los tres puntos, asumiendo riesgos y mirando la portería de enfrente sin ningún tipo de complejos. Eso hizo ver a un Valencia agresivo en campo contrario, llevando la iniciativa y teniendo ocasiones.

Se puso incluso por delante, teniendo el 0-2 a tiro, pero la gran pegada y calidad del Manchester le hizo encajar un gol en la segunda parte, tirando por tierra la ilusión de conseguir los tres puntos.

También ha sido noticia positiva el bautismo europeo en un campo histórico de Guaita, y la sensación de que de la necesidad se hizo virtud y ante la ausencia de César y Moyà, el Valencia descubrió que tiene portero, y bueno.

Guaita estuvo a la altura de la exigencia del partido y dejó detalles de carácter agilidad y personalidad. También cabe destacar el debut europeo de Isco, un joven jugador de 18 años, que tiene un talento extraordinario. Mal cruce para el que piense que el Valencia es una perita...

Más Barça que nunca

El Barça fue mas Barça que nunca, ¿por qué? Porque aprovechó la ocasión para hacer lo que más le gusta y en lo que más cree: tirar de esa magnífica cantera que parece no tener fin y que, jugador tras jugador, sigue teniendo alternativas en diversos puestos.

Hasta cinco jugadores del filial coincidieron en el reto de ganar de una vez por todas al Rubin Kazan, rival al que nunca habían conseguido hacer doblar la rodilla.

Estos cinco jugadores, unidos a otros muchos de la cantera, conformaron un Barça de circunstancias pero un Barça de futuro... un guiño a la filosofía y a la historia reciente de este Barcelona, que sigue siendo fiel en todas las circunstancias a su manera de concebir este juego.

Algo importante en esta natural presencia de canteranos es, primero, la gran confianza que su entrenador les demuestra y, segundo, que llevan desde los siete u ocho añitos escuchando, practicando y desarrollando los mismos conceptos de juego. No hay dobleces, no hay dudas y sí convicciones de que su estilo es innegociable e incomparable.

La única nota negativa fueron las lesiones de Jeffren y de Bojan, otros dos canteranos por cierto... curioso que este partido coincida con la semana en la que se anuncia que tres jugadores del Barça son nominados para el Balon de Oro. El éxito se trabaja... y el Barça lleva años mereciendo algo como esto.

Buena nota para los suplentes del Madrid

El Madrid superó el partido ante el Auxerre con nota, porque consiguió que muchos jugadores menos habituales tuvieran minutos, que otros habituales descansaran y que jugadores de cantera debutaran, teniendo un 'bautismo europeo'.

Comencemos por hablar de los jugadores menos habituales. La pareja Lass-Diarra ha dejado constancia de que, cuando menos, Mourinho tiene donde elegir para acompañar a Xabi Alonso. Creo que tienen capacidad y categoría para disputar el puesto a Khedira.

Granero ha tenido mucho protagonismo y ha asunmido el rol de hacer de enlace, esa media punta que Mourinho le ha adjudicado hoy. Pedro León tiene detalles de grandísimo jugador, y tengo la sensación de que con continuidad y confianza es una muy buena alternativa a los habituales de Mourinho. Dosis de confianza para el murciano, que seguro agradece.

Y terminamos con los debuts de Sarabia y Adán, uno natural y otro forzado por la desgracia de un excelente Dudek. Sarabia ha tenido mucho desparpajo y deja constancia de la gran clase que atesora a pesar de sus 18 años. Ojalá siga teniendo oportunidades; sería una gran señal para él y para el Madrid.

Pero el gran protagonista de la noche ha sido Benzema, un jugador al que todo el mundo ha bautizado como indolente, pero en el que a su vez todo el mundo tiene muchas esperanzas. ¿Por qué esta contradicción? Seguramente por el gran talento físico y técnico que atesora el jugador francés, que pocas veces transmite la sensación de emplearse al máximo en cada acción. Cuando lo hace, y la suerte y el acierto le acompañan, como en el día de hoy, se transforma en un delantero difícil de comprar en otro equipo.

Bien haría el jugador francés en dedicarle toda la atención posible a la continuidad, a la intensidad y al esfuerzo. Si lo hace, no tengo ninguna duda de que el Bernabéu aplaudirá a este curioso jugador.

En definitiva, creo que los equipos españoles no deben temer a nadie en el sorteo, deben de ser temidos...