El Regal Barça revalida su corona de rey del baloncesto español
- El Regal Barcelona supera al Real Madrid por 60-68 en la final de Copa
- Alan Anderson, MVP de la final, lideró la anotación azulgrana
- Datos y estadísticas del Real Madrid - Regal Barcelona
Ficha técnica:
60 - Real Madrid (17+13+13+17): Tomic (12), Prigioni (10), Reyes (3), Tucker (9) y Suárez (8) -equipo inicial-, Llull, Mirotic (8), Rodríguez (8) y Fischer (2).
68 - Regal Barcelona (19+11+18+20): Rubio (1), Navarro (7), Anderson (19), Perovic (2) y Lorbek (9) -equipo inicial-, Sada (7), Vázquez (4), Ingles (1), Ndong (6), Morris (8) y Grimau (4).
Árbitros: Martín Bertrán, Daniel Hierrezuelo y Juan L. Redondo. Eliminado por cinco personales el madridista Tucker.
Incidencias: Final de la 75 edición de la Copa del Rey, que presidió el monarca Don Juan Carlos, disputado en el Palacio de Deportes de Madrid ante 13.045 espectadores.
El Regal Barcelona ha vuelto a coronorarse campeón de la Copa del Rey de baloncesto al imponerse, como ya hiciera hace un año en Bilbao, al Real Madrid, por 60-68. Aunque en esta ocasión el equipo blanco le ha creado muchos problemas, las infinitas prestaciones de la plantilla azulgrana han sido determinantes para su victoria final.
Aunque el buen trabajo el Real Madrid en defensa consiguió anular el juego de Juan Carlos Navarro, errático durante todo el partido, del equipo azulgrana salieron los Lorbek, Sada, Grimau y, por encima de todos, Alan Anderson, el máximo anotador del partido con 19 puntos y MVP de la final. El estadounidense guió a los suyos hacia la victoria, apuntalada por las aportaciones de una plantilla arrolladora.
No se lo puso fácil, no obstante, el Real Madrid. El anfitrión del torneo disipó las dudas de medio Palacio en la primera mitad, en la que consiguió mantener el tipo frente a los hombres de Xavi Pascual, con una aguerrida defensa, con Prigioni haciendo la vida imposible a Navarro, Fischer intimidando en la zona y Suárez echando una mano allí donde hiciera falta.
Sin embargo, la incipiente rabia anotadora de Tucker se fue diluyendo con el paso de los minutos y el Madrid echó en falta un referente en ataque, al que Mirotic se incorporó demasiado tarde, cuando la grada azulgrana ya coreaba las jugadas de su equipo y el torneo ya tenía un ganador.
Nervios y muchos errores
Aunque son dos equipos acostumbrados a las finales, la tensión del momento propició más errores de los habituales en ambos equipos. Lorbek, Tomic y Reyes fallaron bajo el aro en los primeros minutos balones sencillos y contagiaron los nervios a sus compañeros, lo que propició una baja anotación en el partido.
La defensa madridista se centró en Navarro y consiguió bloquear su juego, aunque para entonces ya había explotado el ciclón Anderson, que anotó once puntos sólo en el primer cuarto. Por parte madridista, la garra de Suárez y el acierto de Tomic consiguió mantener la igualdad del encuentro, que fue avanzando con cuentagotas hasta el 30-30 del final de la primera parte.
Con las espadas en alto, Barcelona y Real Madrid volvieron a la cancha para jugar los minutos decisivos de la 75 edición de la Copa del Rey. Se esperaba una reacción de Navarro que nunca llegó, aunque no le hizo falta a su equipo para conseguir revalidar su corona. Dos triples de Lorbek y una férrea defensa consiguieron despegar al Barcelona en el marcador (39-44 a dos minutos del final del tercer cuarto).
La aportación de Grimau y la regularidad de Anderson hicieron el resto, disparando a doce puntos la diferencia en la mitad del último cuarto, cuando el Real Madrid comenzó a apagarse. Sólo Sergio Rodríguez y Mirotic consiguieron mantener el nivel blanco en los últimos minutos y aguantar viva una pequeña llama de esperanza para el triunfo final. Pero una pérdida del 'Chacho' y una 'bomba' de Navarro acabaron por decantar la final del lazo azulgrana.
De esta manera, el Regal Barcelona ha conseguido su segundo título consecutivo en la Copa del Rey y se confirma como el gran 'rey' del baloncesto nacional, igualando en 22 títulos al Real Madrid. La plantilla azulgrana, con Ricky en muletas tras sufrir un esguince de tobillo, recogió de manos de su majestad el Rey Juan Carlos el título de campeón de la Copa del Rey, y su afición lo celebró a lo grande en tierra de su máximo rival.