Catar diseña nubes artificiales para dar sombra en el Mundial 2022
- Nubes de fibra de carbono teledirigidas a distancia suspendidas en el aire
- Los cuatro motores que las componen se alimentarían con energía solar
- Una solución podría ser jugar en invierno y evitar los 44º del verano catarí
La idea es ir un paso por delante, romper las barreras de la tecnología y disponer de todo cuanto haga falta para asombrar al mundo. El mejor escaparate para conseguirlo es único, es el mejor posible, es el Mundial de Fútbol de 2022.
El dos de diciembre de 2010, la FIFA decidió que Catar sería el organizador de la mayor cita futbolística en el año 2022. Desde ese mismo día, la preocupación por el calor hace pensar que la idea de Blatter y los suyos es una locura. La península arábiga soporta temperaturas de hasta 44 grados en las fechas en las que tradicionalmente se disputan los mundiales (principios del verano) y un 90% de humedad.
Fruto de esa inquietud, y de que la FIFA es reacia a jugar en estadios cubiertos, nacen nuevas ideas como si de un paraíso de los ingenieros tecnológicos se tratase. Se ha hablado de jugar en invierno, cosa a la que los clubes no son tan favorables (aunque sea a 12 años vista).
Se da por sentado que los campos que se construirán para el Mundial tendrán aire acondicionado, se juegue en invierno o en verano, pero el nuevo paso es dotar a estos estadios de nubes artificiales mecánicas que proporcionen sombra.
Una nube teledirigida a distancia que asegure unas condiciones óptimas para jugar y ver un partido es el nuevo reto planteado desde Catar. El proyecto ha sido presentado por el responsable del departamento de ingeniería mecánica de la Universidad de Catar, Saud Abdul Ghani, en colaboración con el Parque Científico y Tecnológico de Doha.
La nube estará construida con fibra de vidrio, protegerá de los rayos solares directos y se accionará gracias a cuatro motores que se alimentan con energía solar, según el diseño publicado en el diario 'The Península'.
El coste de la construcción, algo secundario cuando se habla del país árabe, se estima en unos 500.000 dólares con la esperanza de que pueda rebajarse.
La moderna nube sería una revolución cuyo uso podría trasladarse después a otros lugares como playas o aparcamientos gracias a que su tecnología permite controlarla desde un dispositivo similar a un teléfono móvil.
Otra de las novedades que contemplan los organizadores y que ya se planteó antes de la elección del país árabe como organizador era la posibilidad de construir estadios-islas. Campos de fútbol con capacidad para 86.000 personas rodeados por agua para que la temperatura fuera más suave hacia los futbolistas y espectadores.
>
El proyecto del aire acondicionado toma fuerza
La construcción de doce estadios abiertos en Catar ya ha comenzado y la opción de que todos posean aire acondicionado parece estar asegurada. El reto es paliar el calor y también la alta humedad del país.
La refrigeración se llevará a cabo tanto en el campo como en las gradas y funcionará mediante energía solar. Unos paneles fotovoltaicos, instalados en el exterior de los estadios, se aprovecharán del sol abrasador de Catar para enfriar agua y, esta a su vez, enfriará el aire que se inyectará en el interior del coliseo para que la temperatura no suba de 27 grados centígrados.
Será la primera vez que el mundo vea estos avances tecnológicos. Los espectadores dispondrán de unos asientos enfriados de los que salen chorros de aire fresco a la altura de los tobillos asegurando así el placer a los aficionados.
Además, este sistema permitirá también enfriar las instalaciones de entrenamiento de los equipos participantes. Catar se caracteriza por la riqueza que le proporcionan sus extensas reservas de gas y petróleo pero está tratando de diversificar su economía y promoverse también como un destino deportivo y cultural.