Messi salva a su equipo en el infierno del Calderón (1-2)

• Un gol de pillo del argentino al saque de una falta mantiene viva la Liga (1-2)
• El Atlético da el 110% que pidió Simeone pero no es suficiente para ganar
• Todos los datos y estadísticas del Atlético de Madrid 1-2 FC Barcelona

El Barça saca tres puntos en un partido con polémicas

Un gol de Leo Messi de falta, cuando Courtois estaba colocando la barrera, ha servido para que el FC Barcelona haya sobrevivido a un partido emocionante en el que el Atlético de Madrid ha vendido más que cara su primera derrota de la 'era Simeone'. [Estadísticas del partido]

Desde el primer minuto metidos en el partido, como había pedido su entrenador, así han jugado unos jugadores del Atlético de Madrid que, a pesar de la derrota, han tenido que quedarse en el círculo central, una vez acabado el partido, para agradecer la ovación de su afición.

La tensión, el 110% por ciento, lo pusieron los dos conjuntos. El Atlético porque sabía que era la única manera de hacer frente al Barça y los visitantes porque, tras la victoria del Madrid en Vallecas, sabía que podía ser la última esperanza de no dejar sentenciada la Liga.

En los partidos tan emocionantes, los pequeños detalles deciden el resultado y el primer detalle corrió a cargo de Messi en el minuto siete. El argentino adelantó a su equipo pero el árbitro, Pérez Lasa, acertó al anular el gol por mano del delantero.

La intensidad que ponían los colchoneros se trasladaba a las gradas con la ayuda del colegiado. Godín, Juanfran y Arda vieron la cartulina amarilla casi de forma consecutiva en el ecuador de la primera mitad por llegar tarde al choque y el público se encendió en contra de Pérez Lasa. Ni siquiera el gol de Dani Alves fue capaz de silenciar el Vicente Calderón.

Corría el minuto 35 cuando Messi trazó uno de sus slaloms característico para atraer a todos los defensas y habilitar solo a Fábregas en el área. El de Arenys, solo ante el portero, cedió a la derecha para que Dani Alves empujara al fondo de las mallas a puerta vacía y lograra el primer gol.

Ya en la segunda parte llegaría el empate de los rojiblancos al aprovechar Falcao un error de Busquets al tratar de despejar un saque de córner. El colombiano no desaprovechó el balón que le cayó del cielo en el segundo palo y puso el 1-1 en el electrónico.

El Barça acusó el mazazo. Sus posesiones seguían siendo largas, gracias a que el Atleti prefería ceder el peso del juego, pero carecían de llegadas con peligro al área de Courtois. El Atlético en cambio vivió sus mejores minutos a partir de ese 1-1 y por eso Guardiola dio entrada en el campo a Pedro y a Cuenca para tratar de voltear la inercia del choque.

Simeone por su parte metió a Salvio en el césped para oxigenar a un equipo que estaba haciendo un esfuerzo físico brutal en pos de la victoria. Tal vez se debió a ese desgaste físico el fallo que propició el segundo y definitivo gol del Barça.

Una falta al borde del área, que todo parecía indicar que iba a colgar Xavi a la olla, la aprovechó Messi para colarla en la escuadra izquierda de la portería local y dejar, esta vez así, al estadio helado cuando faltaban solamente diez minutos para el final.

Esos últimos minutos finales fue un quiero y no puedo del Atlético. Guardiola se apresuró a meter en el campo al suplente por sorpresa del día, Piquè, y ni la subida al remate del gigantón Courtois sirvió para superar a un Valdés que en los minutos finales puso el broche a otra gran noche bajo los palos.