Saúl Craviotto logra la plata en K-1 200 en un final muy ajustado
- El palista español logra el segundo puesto en la final de K-1 200 metros
- Saúl Craviotto se adapta a la nueva distancia para ganar su segunda medalla
- 'Sete' Benavides se queda cuarto en su prueba del C-1 200 metros
- Teresa Portela ha quedado en la cuarta posición de la final de K1 200
- Sigue el piragüismo de los Juegos de Londres en RTVE.es
El piragüista español Saúl Craviotto se proclamó subcampeón olímpico en la final de K-1 200 metros de los Juegos de Londres. Craviotto, que ya fue campeón en Pekín en la modalidad, ahora no olímpica, de K-2 500 metros, sumó así su segunda medalla.
Una plata de oro
"Era un reto nuevo, completamente distinto para mi en una distancia distinta y antes iba en K-2 y ahora voy individual; o sea, que es un reto que hace muy importante esta medalla", dijo el palista a la prensa mostrando su presea de plata, que tiene sabor a oro.
“Un reto que hace muy importante esta medalla“
El español compitió por la calle tres y sufrió, como el resto de finalistas, un notable viento contrario, que dificultó su paleo. "Yo normalmente hago entrenamientos con viento a favor o plano, pero el viento ha sido para todos", dijo Craviotto.
En esta prueba de esprín todos salieron a tope desde el momento en que se dio la salida. Craviotto siempre estuvo en la pelea y consiguió llegar como segundo, con un tiempo de 36:540, a 294 milésimas de repetir el oro de Pekín.
"En cuanto me he enterado que era segundo, la verdad que fastidia un pelín haber estado a punto de conseguir una nueva medalla de oro. Pero, bueno, una plata hay que valorarla como lo que es: un puestazo", manifestó.
“La plata hay que valorarla como un puestazo“
Los rivales más cualificados de Craviotto fueron el británico McKeever, campeón mundial en 2010 y subcampeón en 2011 y que se llevó la medalla de oro, con 36:246; y el canadiense Mark de Jonge, que fue tercero, en cerrada lucha con el español.
Para meterse de nuevo en el podio, Saúl Craviotto ha tenido que bajar entre ocho y nueve kilos de peso, pero su adaptación a la categoría fue sensacional: "Al ser una distancia más explosiva he tenido que modificar muchas cosas: el entrenamiento, las cargas y la explosividad. Eso se gana con más fuerza, más gimnasia y subiendo de peso", desveló el palista a RTVE.es
“He tenido que modificar muchas cosas“
"En esta prueba tan explosiva hay que estar muy concentrado y creo que en la salida he estado un poco despistado respecto a los demás, pero luego he sacado fuerzas de donde no había para ser segundo", concluyó el español.
Dos cuartos puestos
En la categoría C-1 200 metros también compitió por la calle tres el otro español, 'Sete' Benavides, quien se quedó a unos centímetros de la medalla y firmó, en su debut en unos Juegos, una meritoria cuarta plaza en la final de esta categoría, con un tiempo de 43:038.
“Tengo la mala sensación de haber quedado cuarto“
El palista mallorquín hizo un esprín final muy bueno, pero tal vez la falta de experiencia le pasó factura y lo dejó a las puertas de la presea. 'Sete' llegó a la zona de prensa visiblemente contrariado y parco en palabras: "Tengo la mala sensación de haber quedado cuarto. Cuando me relaje y pase un rato pensaré y ya está".
Y es que el ruso Shtyl, campeón mundial de 2010, arrebató el podio a Benavides por solo 185 milésimas. "No me he visto muy bien en todo el 200, pero he estado luchando. No he podido porque los otros han sido mejores. Han sido unas milésimas, pero el 200 es así. Es lo que hay".
“No he podido porque los otros han sido mejores“
El oro fue para el ucraniano Cheban, bronce en Pekín sobre 500 metros y campeón mundial de 200 metros en 2009; la plata se la llevó el lituano Shuklin, bronce en el último Europeo, entonces justo por detrás de Benavides, que concluyó diciendo: "Yo lo he hecho como he podido. He dado lo que tenía y ya está, no puedo decir nada más".
Por último, en la prueba femenina de K-1 200 metros, Teresa Portela acabó también cuarta. A la gallega, es de Cangas de Morrazo (Pontevedra), el mismo pueblo que David Cal, solo le faltaba la medalla olímpica en su carrera, en la que ha sido campeona mundial y europea.
“Si lo pienso en frío, un cuarto puesto está muy bien“
Sin embargo, Portela se quedó sin medalla y se expreso de forma emocionada y al borde de las lágrimas: "La tensión del momento...si lo pienso fríamente un cuarto puesto está muy bien", dijo con voz entrecortada.
“Creo que merecí el podio“
Desde la calle número dos, Portela tuvo un pequeño despiste en la salida porque no oía bien, pero después continuó con mucha fuerza y se mantuvo así hasta el final. "Yo salí a ganar, con mente ganadora. Sabía que iba a ser duro por el fuerte viento en contra. Me hubiese gustado estar en el podio, porque creo que lo merecí. He entrenado mucho en el último mes y medio. Viví por y para el piragüismo".
La polca Walczykiewicz, que salió en cabeza, desapareció de la escena y entonces la lucha se estableció con la húngara Douchev- Janics, que fue la que se llevó finalmente el bronce, en detrimento de Teresa Portela, que se quedó a dos décimas del objetivo.
El tiempo de Portela fue de 45:326, a 198 milésimas del bronce, que se llevó la húngara. El oro lo alcanzó la neozelandesa Carrington, campeona mundial de 2011 y número uno de esta temporada; y la plata la ganó la ucraniana Osypenko- Radomska, campeona en Pekín sobre 500 metros.