Cristiano Ronaldo clasifica al Real Madrid con su 'hat-trick' (4-0)
- El portugués hizo los goles pero Casillas tuvo que salvar los muebles
- La entrada de Iago Aspas en la segunda mitad puso en aprietos a los blancos
- Todos los datos y estadísticas del Real Madrid 4-0 Celta de Vigo
FELIPE FERNÁNDEZ
Ficha técnica:
4 - Real Madrid: Casillas, Arbeloa, Carvalho, Ramos, Essien, Khedira, Xabi Alonso (Varane, m.46), Modric, Ozil (Di María, m.76), Cristiano y Benzema (Higuaín, m.65).
0 - Celta: Sergio, Hugo Mallo (Roberto Lago, m.45), Túñez (Demidov, m.46), Cabral, Bellvís, Jonathan Vila, Álex López, De Lucas, Krohn-Dehli, Augusto y Park (Iago Aspas, m.56).
Goles:
1-0, m.3: Cristiano Ronaldo.
2-0,m.25: Cristiano Ronaldo.
3-0, m.90: Cristiano Ronaldo.
4-0, m.91: Khedira.
El Real Madrid ha conseguido el pase para los cuartos de final de la Copa del Rey con más apuros de los previstos. Tres goles de Cristiano Ronaldo y uno de Khedira han terminado por eliminar a un Celta de Vigo que no perdió la cara en ningún momento e incluso tuvo que hacer emplearse a fondo a Casillas para no empatar la eliminatoria. [Estadísticas del Real Madrid 4-0 Celta de Vigo]
Con pitos y aplausos a partes iguales, así recibió el Santiago Bernabéu a Jose Mourinho cuando la megafonía anunció su nombre. El número de silbidos fue menor respecto al partido de Liga frente a la Real Sociedad y es que esta vez el portero titular que se había anunciado previamente era Iker Casilllas en detrimento de Adán.
En el otro lado, Paco Herrera ratificaba lo dicho en rueda de prensa con su once titular. Su estrella, Iago Aspas, arrancaba en el banquillo y eran De Lucas y el coreano park los más adelantados.
Cuando no se habían silenciado los cánticos a favor de Casillas por parte de la parroquia merengue llegó el primer gol de Cristiano Ronaldo que clasificaba para los cuartos a su equipo cuando solo se llevaban jugados dos minutos.
El portugués lanzó un misil desde el costado izquierdo y el balón –al que Tito Vilanova bautizó como un balón de playa– con el que se jugaba se endiabló durante la trayectoria ridiculizando la estirada del portero celtiña Sergio.
El comenzar con gol ayuda pero el equipo blanco era otro completamente diferente al que se encontró el celta en el partido de Balaídos. Esta vez, Özil y Modric lograban aliarse con Xabi Alonso en la creación y eso lo acusaban los gallegos.
Con el paso de los minutos, el Madrid fue desapareciendo por momentos –película tantas veces repetida esta temporada– y el Celta consiguió desesperezarse y salir de su área en la que estaba encerrado. Así hasta que llegó el segundo gol de CR7.
Modric la puso a la espalda de la zaga gallega y el portugués cazó el centro con su pierna izquierda al primer toque alojando el esférico al fondo de las mallas. Fue un mazazo en forma de gol que el Celta volvió a acusar.
Hugo Mallo se rompe antes del descanso
Una minitángana entre De Lucas y Sergio Ramos que se saldó con tarjeta para el andaluz y para Arbeloa estaba llamada a ser la última acción destacable de la primera mitad pero por desgracia, el lateral Hugo Mallo tuvo que abandonar el campo en camilla echándose la mano a la rodilla.
La segunda parte comenzó con la preocupación reflejada en caras de los jugadores del celta. A la grave lesión de Mallo había que unir la de Tuñez que se quedaba en la ducha y dejaba su puesto a Demidov.
En el Madrid también hubo cambios y es que Xabi Alonso se fue a los vestuarios con molestias en las cervicales y Varane saltó en su puesto en la reanudación. Mourinho cambió el dibujo, Essien abandonaba el lateral diestro para acompañar a Khedira en el medio y Sergio Ramos se iba al lateral para que Varane jugara de central.
Tantos ajustes beneficiaron paradójicamente al Celta y perjudicaron al Real Madrid. Los blancos no eran capaces de sacar un balón jugado desde su campo y el run-run del Bernabéu empezó a sonar.
A los diez minutos, Mourinho ordenó a Varane que se fuera al lateral y que Sergio Ramos volviera al centro de la zaga bajo una pitada importante del respetable blanco.
Para avivar el fuego, Paco Herrera metió en el campo a Iago Aspas con el objetivo de aprovecharse de la situación y conseguir el gol que empatara la eliminatoria.
'El Santo' se apareció tras la expulsión de Ramos
La inclusión del delantero de Moaña conllevó los mejores minutos del Celta en el partido. Ni las entradas de Higuaín y Di María cambiaron la cara a un Real Madrid que tenía que encomendarse a las intervenciones de Casillas, sobre todo desde el minuto 78 en el que Sergio Ramos veía la segunda amarilla y dejaba a su equipo con diez.
Era el momento de Iker Casillas y de sus intervenciones de 'santo'. El de Móstoles repelió a córner dos disparos casi consecutivos a falta de un cuarto de hora para el final que hubieran cambiado y mucho la película.
Para acabar con el nerviosismo, en una contra mortal en el minuto 87, apareció de nuevo Cristiano Ronaldo para disipar las dudas y llevar al Madrid a cuartos de final. Después, Khedira redondeó la cuenta.
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