España gana a Senegal sin despeinarse y se enfrentará a Francia en cuartos

• La selección española dio muestras de inseguridad en defensa y en el tiro exterior
• Pau (17), Reyes (11), Calderón (11) e Ibaka (11) fueron los máximos anotadores
• Datos y estadísticas del España 89 - Senegal 56

Pau Gasol (I) realiza un mate ante la mirada dek jugador senegalés Gorgui Dieng.

• Ficha técnica

89 - España (23+18+21+27): Pau Gasol (17), Rudy (5), Navarro (4), Rubio (7) y Marc Gasol (9) -equipo inicial-, Rodríguez (5), Calderón (11), Reyes (11), Claver, Llull (7), Ibaka (11) y Abrines (2).

56 - Senegal (17+11+15+13): Dalmeida (5), Maleye N'Doye (2), Faye (12), N'Diaye (6) y Dieng (6) -quinteto inicial-, Niang (4), Badji (12), Thomas (2), Diop (2), N'Dour (4) y Mamadou N'Doye (1).

Árbitros: Sreten Radovic (CRO), Mate Boltauzer (SLO) y Robert Lottermoser (ALE). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de final de la Copa del Mundo, disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Granada, ante 13.400 espectadores. Lleno. El rey Felipe VI presenció el partido.

Coser y cantar. O mejor: encestar y cantar. Así ha ganado la selección española de baloncesto a Senegal y se ha clasificado para cuartos de final del Mundobasket 2014, en los que se volverá a ver las caras con Francia. [Datos y estadísticas del España 89 - Senegal 56].

Sacó Orenga a la cancha a su quinteto rompehielos: Rudy, Ricky, Navarro y los hermanos Gasol. En el primer cuarto, la conexión Ricky-Pau destrozó la línea defensiva africana. España apabulló a Senegal ofensivamente, con un Pau Gasol agigantado bajo el aro que saldó el primer cuarto con 13 puntos (8 de ellos gracias a asistencias de Ricky Rubio).

El primer parcial finalizó con un marcador de 23-17 favorable para España.Y la diferencia no fue mayor porque los hombres de Orenga, muy superiores en todo momento, no estuvieron finos en defensa y se mostraron erráticos desde más allá de la línea de 6'75.

El segundo cuarto fue prácticamente una continuación del anterior. España seguía sumando puntos pero la falta de intensidad defensiva permitía que Senegal se mantuviese a rebufo en el marcador; con Badji y Faye como hombres más destacados. España tenía el control del partido pero su efectividad se reducía a los tiros dentro de la pintura, con continuos fallos en los lanzamientos exteriores (un triple de once intentos en toda la primera mitad).

Se llegó al final de la primera parte con 41-28 en el marcador. 13 puntos por encima; la máxima diferencia hasta entonces. La selección senegalesa seguía aferrándose a su imponente físico para impedir que una España a medio gas despegase definitivamente hacia los cuartos de final.

Puntos de por medio

Fue a partir del tercer cuarto cuando España se marchó definitivamente en el marcador. A Pau Gasol, con unos números ofensivos más discretos debido a las rotaciones, se unieron en ataque su hermano Marc, Sergio Llull y Rudy Fernández. Un triple de José Manuel Calderón puso la máxima diferencia haste el momento, 22 puntos: 57-35 a falta de 3 minutos para el final del tercer cuarto.

El partido estaba visto para sentencia pero Senegal no terminaba de bajar los brazos. Una bomba de Llull, al más puro estilo Juan Carlos Navarro, cerró el tercer cuarto con un marcador de 62-43. 19 puntos de ventaja para España.

Último cuarto para regocijo español

Levantar 19 puntos a España en los diez minutos finales era una misión imposible para Senegal y la selección africana comenzó además a acusar el desgaste. La diferencia favorable para España aumentó aún más, a medida que José Manuel Calderón enmendaba en parte la falta de acierto exterior española y se situaba con once puntos (de los que nueve correspondían a tres triples), por detrás de Pau Gasol, con 17 puntos.

Felipe Reyes, en un gran partido, finalizaba también con once puntos en su casillero personal; acompañado por Ibaka, que terminó con los mismos puntos.

Un maravilloso contraataque, culminado por un 'alley oop' de Abrines a pase del 'Chacho' Rodríguez, cerró el encuentro con 89-56. Los 33 puntos de diferencia evidenciaban la aplastante superioridad española, pero maquillaban la inseguridad en defensa y en el tiro exterior de los de Orenga.