Francia vuelve a tomarle la medida a España
- La selección francesa anula el ataque de la española y le priva de las 'semis'
- La peor versión del combinado español se queda fuera de las medallas
- Los galos jugarán contra Serbia en semifinales del Mundial
- Datos y estadísticas del Francia 65 - España 52 2014
Ficha técnica:
65 - Francia (15+20+7+23): Heurtel (13), Batum (9), Lauvergne (4), Diaw (15) y Gelabale (9) -equipo inicial-, Diot (4), Jackson, Fournier (4), Pietrus (2) y Gobert (5).
52 - España (15+13+15+9): Pau Gasol (17), Rudy (6), Navarro (10), Rubio (4) y Marc Gasol (3) -equipo inicial-, Rodríguez, Calderón (5), Llull (5) y Ibaka (2).
Árbitros: Luigi Lamonica (ITA), Michael Aylen (AUS) y Olegs Latisevs (LAT). Pau Gasol fue eliminado por cinco personales (min.40).
Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Mundo, disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Granada, ante 13.673 espectadores. Lleno. El rey Juan Carlos presenció el partido.
España cae ante Francia (65-52) y se queda sin poder disputar las medallas en el Mundobasket 2014. Serán los actuales campeones de Europa, los que se midan a Serbia el próximo viernes por un puesto en la gran final.
La anfitriona se veía en la final después de una primera fase de ensueño, pero los franceses demostraron que no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo. Y el oso galo demostró tener mucha energía reservada.
Los de Juan Antonio Orenga mostraron su peor versión ofensiva, a la vista del marcador, pero tampoco es que estuvieran mejor que su rival en otras facetas del juego.
Aun así, la 'ÑBA' llegó hasta casi el final del partido con opciones, pero el base Thomas Heurtel (13 puntos) se encargó de echar el telón del partido.
España, a remolque desde el principio
Que no iba a ser un camino de rosas lo demostraron de inicio los galos con un 11-2, apoyado en seis puntos de dos triples anotados por Boris Diaw y con la contribución de una España que tardó tres minutos en anotar su primera canasta.
Pau Gasol, que había sido duda por unas molestias musculares, se sentó después de siete minutos sin anotar y haciendo gestos con la cabeza. Navarro había recortado la diferencia y el recién salido Ibaka ponía el aliento en el cogote de Francia, para que la asociación Rudy-Marc diera a España la primera -aunque efímera- ventaja (11-12).
La igualdad y la alternancia fueron las notas dominantes en el primer cuarto, tanto que se llegó con empate a 15 en el marcador al final. Una buena defensa sobre Batum en la última de Francia y un triple fallado por Ibaka dejaron inmóvil el marcador en el último minuto.
Tocaba remar contracorriente también en el inicio del segundo cuarto, ante una Francia que había perdido los complejos en el interior de la zona y la falta de fluidez ofensiva de España.
Pau Gasol, en pista desde el final del primer parcial, se mostraba dubitativo ante la intensa defensa gala, pero Orenga decidió rotar a los exteriores. Llull y Calderón dieron la réplica a sendos intentos de Francia de abrir brecha, mientras que Ibaka recuperaba poderío intimidatorio con un tapón.
Sin embargo, no entraba un solo triple de los siete intentados. Para colmo, el susto que se llevó el 'Chacho' Rodríguez al tener que ser sustituido por una costalada. Pau devolvía algo de esperanza con una canasta de dos (21-21), la primera en los 12 minutos que llevaba en cancha.
Pero Francia era otra y de nuevo se escapaba a seis puntos de la mano de Batum y Gelabale (27-21), mientras que España era un manojo de nervios: Ibaka fallaba un mate claro y Calderón no acertaba a ponerle en la mano un alley oop.
Por fin, después de diez intentos, llegó el triple gracias a Calderón (30-26). La selección española parecía volver a meterse en un partido que no controlaba, una situación a la que no estaba acostumbrada en lo que llevaba de campeonato. Una canasta de Batum y un tiro libre de Lauvergne dejaron la renta en siete puntos para Francia al descanso.
Reacción de Navarro
La selección española había cerrado su peor primera parte del torneo. El Palacio de los Deportes estaba helado. Pero tras el descanso recibió a los jugadores con ánimos y estos respondieron con un gran parcial (11-4).
Empezó anotando Pau, pero el liderazgo encestador lo llevó un inmenso Navarro, 'la Bomba', para contribuir a poner el 39-39 en el marcador con un triple de por medio; el segundo del equipo. Ayudó la mejoría en defensa, agotando la posesión de los franceses en dos ocasiones.
La grada lo celebraba, pero los de Collet trataron de romper el ritmo y se encontraron con la polémica como aliada. Una doble técnica por una falta de Llull y un encontronazo de este con Pietrus cortó la racha. El menorquín anotó un tiro libre, al menos, para volver a poner a España por arriba (39-40), aunque el juego de la selección iba a trompicones y se fallaban canastas fáciles.
Marc Gasol, que celebraba su paternidad, acusaba el viaje de ida y vuelta a Barcelona para conocer a su hija Julia. Apenas se le veía en el ataque y fallaba uno de los dos tiros libres que podrían haber anulado la ventaja dada a los franceses por Batum (42-41).
El espectáculo no volvía, pero sí la intensidad para conectar por fin un alley oop entre el Chacho y Rudy, más un tapón de "aquí estoy yo" Pau Gasol para terminar un cuarto, el tercero, por vez primera liderando el electrónico (42-43).
Diez minutos de agonía
Último cuarto de partido; guarismos bajos como quería Francia, pero todo por decidirse entre dos equipos con alma de campeones. No terminaba de encontrar la tecla un Orenga que movía continuamente el banquillo, buscando la combinación.
Mientras, los franceses mantenían su esencia y obligaban a pedir tiempo muerto al seleccionador tras un triple de Diaw (51-45). No había acierto en ataque y tampoco había segundas oportunidades porque 'les bleus' doblaban en el aspecto reboteador (30 a 14) a falta de cinco minutos.
La 'ÑBA' estaba asfixiada y necesitaba el aire del público. Este reaccionó con un 2+1 de Pau (51-48) que hizo tronar el "sí se puede" en el Palacio. Pero eran 48 puntos en 37 minutos, muy poco para el segundo equipo mejor anotador del torneo.
El reloj se ponía en contra de España y el baskonista Heurtel tomaba el mando de Francia para contestar al arrojo de Pau (57-52) a falta de dos minutos. Orenga pedía tiempo muerto a ver si refrescaba ideas, pero Heurtel se encargaba de descartar toda esperanza con un triple (60-52) a falta de un minuto, que terminó siendo un mero y triste trámite (65-52).
El público la tomó con Orenga como amarga despedida. La despedida de, tal vez, la mejor generación de la historia de nuestro baloncesto.