La marcha, referencia absoluta del atletismo español

• El último oro mundialista refrenda la importancia de esta especialidad
• Los marchadores españoles, desde siempre entre los favoritos
• García Bragado y 'Paquillo' Fernández allanaron el camino

Miguel Ángel López celebra su oro en Pekín

Con la hazaña de Miguel Ángel López aún en la retina se pone de manifiesto el papel fundamental que ha jugado la marcha en el atletismo español. Los Juegos Olímpicos, mundiales y europeos han dejado buena muestra del nivel de nuestros marchadores. Con su oro en Pekín, el murciano se une a una lista encabezada por nombres de la talla del eterno García Bragado, ‘Paquillo’ Fernández o el primerizo Jordi Llompart.

El atletismo nunca ha sido un deporte enormemente exitoso para España en lo que a resultados se refiere. Desde siempre, los niños españoles han visto en los deportes de equipo, como el fútbol o el baloncesto, el foco de sus sueños. Por ello, los deportes individuales, como la natación o el atletismo, han quedado relegados a aquellos ‘locos solitarios’ que tienen la ilusión de convertirse en héroes.

“El atletismo ha quedado relegado a 'locos solitarios'“

Aunque España no haya sido nunca una potencia atlética, hay una disciplina que sí ha tenido a los españoles como favoritos año tras año, competición tras competición: la marcha. Esta modalidad tan particular, cómica para algunos por ese andar vertiginoso a la par que exhausto, ha dado numerosas alegrías al deporte español.

No se sabe el porqué, pero esta disciplina ha enganchado al deporte español y ha permitido concebir numerosos héroes, como Jordi Llompart, Jesús Ángel García Bragado, ‘Paquillo’ Fernández o el más reciente, Miguel Ángel López. Juegos Olímpicos, así como Campeonatos de Europa y del mundo han presenciado como los marchadores españoles se subían al podio con regularidad.

Los 20 km olímpicos, grandes protagonistas

La competición más importante del panorama deportivo internacional, los Juegos Olímpicos, ha sido bastante rácana en cuanto a medallas con la delegación española. Un total de 12 preseas han sido las conseguidas por atletas de nuestro país en hasta 18 Juegos que han contado con participación española.

Dentro de esta docena de metales, la marcha ha tenido un papel fundamental. Cinco atletas de esta especialidad se colaron en el podio final. El idilio de la marcha con España comenzó en Moscú 1980 con el segundo puesto de Jordi Llompart en los 50 km. Los exitosos Juegos de Barcelona en 1992 contaron con el único oro español en marcha. Daniel Plaza lo alcanzó en la prueba de los 20 km. Esta distancia precisamente es la que más exitos ha dado al atletismo español, como se vería más tarde.

“Cuatro de las cinco medallas olímpicas de marcha son en 20 km“

El catalán Valentí Massana vivió en Atlanta 1996 su gran momento al situarse en el tercer cajón del podio en 20 km. La delegación española tuvo en María Vasco su salvación en los Juegos de Sidney en el 2000. La marchadora barcelonesa alcanzó el bronce en los 20 kilómetros de esta especialidad. Por último, ‘Paquillo’ Fernández se alzó con la plata en los Juegos de Atenas 2004 en la misma distancia.

El Mundial, con Bragado y ‘Paquillo’ a la cabeza

Si en los Juegos el éxito del atletismo español ha sido bastante escaso, en los Campeonatos del Mundo no puede decirse lo mismo. Aunque comparada con otros países, España no es una potencia en este deporte, los mundiales han colgado una buena cantidad de metales en los cuellos de españoles. Hasta 39 medallas ha sumado nuestra delegación, siendo 17 de ellas pertenecientes a la marcha, contando con la reciente de Miguel Ángel López.

Jesús Ángel García Bragado celebra su plata en 50 km en Gotemburgo 2006 EFE (Alberto Estévez)

José Marín abrió la veda en Helsinki 1983 con una plata en 50 km, mientras que se alzó con el bronce en los 20 km de Roma 1987. Stuttgart 1993 dejó clara la importancia de la marcha en España. Cuatro de las cinco medallas fueron en esta especialidad. Valentí Massana y Daniel Plaza fueron primero y tercero repectivamente en 20 km, mientras que Jesús Ángel García Bragado se alzó con el oro en 50 km. En el apartado femenino, Encarna Granados consiguió el bronce en 10 km.

Valentí Massana repitió en Gotemburgo 1995, aunque esta vez se hizo con la plata en los 20 km y dos años más tarde García Bragado se colgó la plata en Atenas en los 50 km. En Edmonton 2001, el marchador madrileño repitió la segunda posición en la distancia larga. En París Saint-Denis 2003 apareció ‘Paquillo’ Fernández y se hizo con la segunda posición en los 20 km. Dos años después en Helsinki repetiría posición, aunque esta vez Juan Manuel Molina le acompañó con el bronce en esta prueba.

De nuevo ‘Paquillo’ se colgó la plata en los 20 km de Osaka 2007 y ese año María Vasco fue tercera en la misma distancia en la prueba femenina. García Bragado apareció de nuevo en el podio de Berlín 2009, siendo bronce en los 50 km. En 2013, Moscú presenció la aparición de Miguel Ángel López, que se situó en la tercera plaza en el podio de los 20 km, presagio de lo que ocurriría dos años después.

Los Europeos, terreno a trabajar

Aunque en un principio podría pensarse que la competición continental permite que los atletas españoles suban posiciones en la clasificación, por el menor nivel de sus participantes, no ha ocurrido esto en la marcha. De las 71 preseas logradas por nuestros atletas, tan solo 14 se han logrado en pruebas de marcha.

Jordi Llompart, oro en Praga 1978 en 50 km y José Marín, oro en 20 km y plata en 50 km en Atenas 1982 fueron los primeros protagonistas españoles en esta especialidad. En Stuttgart 1986, el combinado español consiguió otras dos preseas en marcha, el bronce de Miguel Ángel Prieto en 20 km y el oro de Mari Cruz Díaz en 10 km. Daniel Plaza continuó con el éxito en los 20 km europeos con una plata en Split en 1990.

“De 71 medallas, tan solo 14 han sido de marcha“

Los exitosos europeos de Helsinki 1994 para el equipo español contaron también con un bronce de Valentí Massana en 20 km. Cuatro años después, en Budapest, ‘Paquillo’ Fernández se alzó con el bronce en 20 km. Otros tres metales se lograron en Munich 2002 por parte de la marcha española. Oro de ‘Paquillo’ Fernández en 20 km, y bronces de Juan Manuel Molina y Jesús Ángel García Bragado en 20 y 50 km respectivamente.

García Bragado volvió a triunfar en los 50 km en Göteborg 2006 al conseguir la plata, mientras que ese año ‘Paquillo’ se colgó el oro en los 20 km. La última medalla lograda en un campeonato europeo por parte de un marchador español fue la de Miguel Ángel López el año pasado, con su oro en Zurich en 20 km.