Un Barça arrollador vuelve a llevarse la Copa de Madrid
- El Barcelona se impone por un contundente 73-88 en la final de la Copa del Rey
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Ficha técnica:
73 - Real Madrid: (11+20+19+23): Llull (8), Causeur (5), Abalde (15), Deck (9) y Thompkins (8) -cinco inicial-, Carroll (-), Tyus (-), Laprovittola (-), Tavares (17), Reyes (2), Garuba (-) y Alocén (9).
88 - Barça: (20+32+17+19): Calathes (12), Higgins (20), Hanga (3), Mirotic (12) y Pustovyi (2) -cinco inicial-, Oriola (2), Abrines (8), Davies (10), Westermann (-), Bolmaro (-), Smits (13), y Kuric (6).
Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Carlos Peruga y Antonio Conde. Sin eliminados
Incidencias: Final de la Copa del Rey 2020-2021 disputada a puerta cerrada por la pandemia en el WiZink Center de Madrid.
El FC Barcelona es el nuevo campeón de la Copa del Rey tras arrollar a un errático Real Madrid en la final del torneo en el Wizink Center (73-88), en el que el equipo azulgrana fue un auténtico rodillo y se apuntó su tercera Copa en los últimos cuatro años, ganando de nuevo a los de Laso en su territorio, como hizo hace dos años en la última final entre ambos.
Si aquella final se tuvo que resolver con el videoarbitraje en un final muy apretado, en esta hubo un claro ganador desde la primera parte. Los dos primeros cuartos del equipo de Jasikevicus fueron demoledores y asfaltaron el camino hacia el trono de campeón ante un Madrid con escaso acierto exterior (7/28 en triples) y muchas grietas en defensa.
Pese al fantástico inicio de partido de Alberto Abalde, con cinco puntos de incio, el Madrid se puso el partido cuesta arriba muy pronto. El Barça, apoyado en Mirotic y en un imparable Smits endosó un parcial de 0-14 con el que escribió las primeras frases del guión de la final en un primer cuarto casi desierto en el tiro madridista (11-20).
El equipo de Laso trató de responder en el segundo cuarto, de nuevo a través de Alocén, la única luz encendida en la nave blanca, pero el Barça, impenetrable en defensa y muy acertado en ataque, con Abrines enchufándolas sin fallo desde la línea de tres (8 de 8 en todo el torneo) o Higgins en estado de gracia, cortó de raiz cualquier intento de su rival. Con un nuevo parcial de 3-13, el Barça volvió a volar en el marcador, alcanzado un +23 como máxima diferencia en un primer tiempo en el que el Madrid se fue al vestuario con un 2/12 en triples y 9/20 en tiros de dos, mientras que el Barcelona lo hacía con un 71% en tiros de dos.
El Barça mantiene a raya al Madrid
Tras el descanso, las miradas estaban puestas en la estrategia de Laso para levantar un partido muy complicado y poder luchar por la final de la Copa. El técnico vitoriano metió a Garuba en busca de mayor poderío defensivo y el Madrid se lanzó a la remontada confiando en la mejoría de su tiro exterior. Y, de inicio, el Madrid consiguió despertar e, incluso, levantar al escaso público que había en las gradas, compuesto por miembros e invitados de los clubes y patrocinadores.
El Madrid se agarró a Llull, que anotó dos triples, pero no encontró el habitual acierto de Jaycee Carroll, negado esta tarde en el Wizink. En defensa, la entrada de Garuba mejoró el panorama junto a un Tavares que, de nuevo cargado de faltas desde muy pronto, fue de menos a más pese a no encontrarse al 100% en en esta Copa. El caboverdiano aportó su fuerza en el parcial de 9-0 que acercó al Madrid en el luminoso (40-55).
Sin embargo, el Real Madrid tenía mucho que remontar y el Barça no lo permitió. Los de 'Saras' gestionaron bien su enorme renta y, asentados en el físico y su robusta defensa, llegaron al último cuarto 19 arriba (50-69), certificando el triunfo en un último cuarto en el que el Madrid lo intentó por todos los medios pero solo consiguió acercarse a once puntos (67-78). El Barça cerró el paso con Calathes perfecto en la dirección (9 asistencias) y Higgins desatado (20 puntos), y se convirtió en el campeón de esta extraña e histórica Copa del COVID, el primero título en la era Jasikevicius, y el primero de MIrotic de azulgrana.
Cory Higgins, MVP de la Copa
Ya avisó Laso en la mañana de este domingo: ojo con Cory Higgins. El estadounidense había sido el mejor del Barça en los cuartos de final y en las semifinales, y refrendó su gran actuación con el título de MVP de la competición tras una nueva gran actuación en la final, en la que anotó 20 puntos (6/13 en tiros de dos, 1/2 en triples y 5/6 en tiros libres), capturó 3 rebotes, colocó un tapón y dio una asistencia en casi 29 minutos de juego.
Higgins, que sucede a Facundo Campazzo en esta distinción, avisó tras la final de que esta Copa "solo es el principio" de los éxitos que aspira a conseguir esta temporada su equipo, pero ha reconocido que va a "ayudar" a seguir creciendo a una plantilla que es "una familia".
"Somos una familia desde el primer día que llegó el nuevo entrenador. Esta temporada ha sido un proceso desde las primera semanas y ese proceso todavía continúa. Este título nos va a ayudar, pero solo es el principio. Es un paso más y debemos continuar trabajando", explicó Higgins ante la prensa.
“Esta Copa solo es el principio“
El norteamericano restó importancia a su reconocimiento como jugador más valioso: "Para mí lo único importante son los títulos colectivos. Sin el trabajo de mis compañeros y de todo el equipo técnico no lo hubiera conseguido. Este MVP no significa mucho para mí, lo que importa es el equipo", finalizó.