Marc Gasol y los Lakers, una apuesta fallida

• El español firmó en noviembre por el equipo angelino a razón de dos años y cinco millones y se marcha tras solo 10 meses
• La temporada 20/21 fue la peor de su carrera con registros mínimos en puntos, minutos, rebotes, tiros y partidos como titular

Marc Gasol, antes de comenzar un partido con los Lakers

Marc Gasol se marcha de Los Ángeles Lakers tras una temporada para olvidar. El español se decantó en noviembre de 2020 por el equipo campeón de la NBA con un contrato casi mínimo (dos años por unos cinco millones), rechazando propuestas de mayor calado económico. Pero la opción deportiva era inmejorable, iba a buscar su segundo anillo y el 'back to back' de los Lakers junto Lebron James y Anthony Davis. Irresistible. El sueño ha durado menos de 10 meses, aunque su camino de púrpura y oro empezó a torcerse antes.

En su debut, no vio canasta y en el segundo se quedó con dos puntos anotados. Marc, que ejercía el papel de titular, asumió el rol de pívot generador y defensor desde el minuto uno. Los guarismos importaban poco, el objetivo principal era ayudar al equipo a ganar. Y sí, partía desde el inicio, pero sus minutos se empezaron a ver mermados por el físico, la proyección y el contratazo (18 'kilos') de Montrezl Harrel. De hecho, a pesar de pintar su nombre en los quintetos del inicio, Harrell terminó el año con más tiempo medio jugado, 22.9 por los 19.1 del catalán.

Febrero, el mes que lo cambió todo

Gasol aguantó la situación, pero la gota que colmó el vaso llegó en febrero. Primero, se contagió de coronavirus y estuvo varias semanas de baja, en las que se perdió casi una decena de encuentros. Fueron "semanas largas" de espera para recuperarse de una enfermedad que le golpeó "fuerte": "No me podía mover mucho, pero el peor síntoma para mí fueron los dolores de cabeza y la dificultad para respirar". Luego, los Lakers anunciaron por todo lo alto la contratación, como agente libre, de Andre Drummond y Marc, que estaba volviendo a la acción con minutos restringidos, se vio sin ellos. Hasta 12 veces se quedó sin jugar. Estaba claro que Drummond ocupaba su puesto y que le tocaría repartir tiempo de acción con Harrell, según las vicisitudes del juego.

Marc estaba molesto y así lo dejó claro a los medios de comunicación: "Las cosas cambian rápido en la NBA, pero estoy comprometido con el equipo. Cuando no estás en el plan A, sino en el C o D tienes que aceptarlo porque es tu trabajo y es lo que firmaste hacer, pero nunca es fácil". Más profesional que nunca, esperó su turno y cuando las lesiones hicieron mella en Drummond, recuperó su mejor nivel de baloncesto del año, como si de un animal herido se tratase.

Apretó en defensa y subió su participación ofensiva, aunque fue tarde. No pudo maquillar el peor año de su larga carrera (13 años) NBA. Mínimos en puntos, minutos, rebotes, tiros intentados y partidos como titular en un curso que acabó en la primera ronda de Playoffs y otra vez con cero puntos, en el decisivo quinto encuentro ante los Suns.

Nuevo asalto al anillo

A los Lakers de Lebron James se les acaba el tiempo. El 'Rey' cumplirá 37 primaveras en diciembre y tienen que intentar de nuevo hacer saltar la banca por los aires. Rob Pelinka, general manager de la franquicia, no se lo ha pensado y ha renovado el equipo de cabo a rabo. Del curso 20/21 solo quedan tres jugadores (LeBron, Davis y Horton-Tucker). Y a Marc le ha tocado salir.

Estaba cantado, tras los fichajes de Dwight Howard (campeón en el 2020) y DeAndre Jordan. Sin sitio para el español, y para ahorrarse unos 10 millones en impuestos de lujo, han preferido mandar a Marc a los Grizzlies a cambio de una segunda ronda de 2024 y de los derechos de Wang Zhelin. Así, además, se quedan con 13 fichas garantizadas y tendrán flexibilidad, durante el año, para contratar a otro jugador.

Sin embargo, parece que aunque Gasol ya es propiedad de los Grizzlies, no se vestirá de corto. Según Adrian Wojnarowski, periodista de ESPN, el jugador catalán y los de Tennessee buscarán ahora una salida que le permita quedarse en España con su familia, un deseo del jugador tras la pandemia.

Esta sería una opción posible. Marc evidencia un declive físico desde el verano de 2019. En ese periodo estival disputó, y ganó, las Finales con Toronto Raptors y se coronó campeón del Mundial de China, con exhibición en semifinales ante Australia incluida. Llegó cansado al inicio de la temporada de la pandemia y tampoco pudo recuperarse en la burbuja de Disney. En Lakers, como se ha apuntado, nunca llegó a hacerse indiscutible y en los Juegos tampoco rindió como se esperaba. En el partido de cuartos ante Estados Unidos, el pívot disputó nueve minutos y no firmó ninguna canasta.

Visto lo cual, sí, quizás sea momento de volver a España. En un baloncesto menos exigente en el apartado físico, podrá imponer su conocimiento del juego. Pondría, así, fin a 13 años en la mejor liga del mundo, donde logró tres participaciones en el All Star, el premio como mejor defensor y un puesto en el mejor quinteto del año 14/15, además del anillo del 2019. Barcelona, su club de origen, y el Bàsquet Girona, donde es presidente, le esperan.