'Estoy muy cerca del final de mi vida. Tengo 89 años y me gustaría pedirles que consideren darle a mi país el honor de organizar los Juegos Olímpicos de 2016'. El pasado mes de octubre, en Copenhague, Juan Antonio Samaranch apoyaba así a Madrid en su lucha por organizar los Juegos de 2016. Hasta sus últimos días Samaranch defendió la posibilidad de ver a España albergar sus segundos Juegos Olímpicos. Nacido el 17 de julio de 1920 en Barcelona, en una familia acomodada, presidió el Comité Olímpico Internacional (COI) desde 1980 hasta 2001, año en el que fue designado Presidente de Honor.
La desaparición de Juan Antonio Samaranch, muerto este miércoles en Madrid a los 89 años, deja huérfana a la familia olímpica española y un terrible vacío entre los aficionados al deporte. A sus 89 años, Samaranch ha sido bandera del juego limpio, del espectáculo y, sobre todo, del movimiento olímpico en España. Él fue el gran impulsor de los Juegos de Barcelona 92 y una de las personas que más luchó por la candidatura olímpica de Madrid 2016. Samaranch era era querido en todo el mundo y admirado por todas aquellas personas que entendían el deporte como una competencia noble y leal entre iguales. Hoy, los aficionados de todas partes tenemos que reconocer la gran deuda que tenemos con él. Por eso te proponemos que dejes tu mensaje de despedida, tu adiós al hombre que ha simbolizado como nadie lo que es el espíritu de la Olimpiada. Puedes dejar tu homenaje en los comentarios de esta noticia.
A pesar de encontrarse ante los que eran los últimos días de su vida, Samaranch sacó hace poco fuerza y coraje en una entrevista en 'La Tarde en vivo' para rendir tributo al también fallecido Juan Manuel Gozalo. Casi sin fuerzas, habló de él como un gran amigo y un gran profesional que debería servir como ejemplo a la profesión periodística. "Tenía mucho trato con él, recuerdo que le llamábamos Kubalita porque era rubio como él... y la verdad es que era un hombre bromista, pero muy serio en su trabajo". Samaranch demostró así ser un hombre generoso, ese embajador de los valores olímpicos que tanto ha hecho por el deporte.