Sainz es el piloto más rápido. Tiene un coche campeón que va como un tiro. Pero llegaron los errores en la navegación que le alejaron de Nasser y de Peterhansel.
Tuvo mala suerte en una etapa con el turbo de su coche que se estropeó y en otra con el líquido de frenos. Se alejó a más de una hora de sus dos grandes rivales y empezó a mosquearse con todo.
Fue un Sainz menos diplomático que otras veces, que se quejó de casi todo, sin quitar mérito a sus rivales, pero si poder esconder y sin ni siquiera disimular su frustración el último día. No le valía ser tercero ni haber ganado tres etapas.
Solo quería ganar. Dijo que "hay que reflexionar" Eso incluye muchas cosas. Darle un toque a la organización para que no ponga etapas de navegación más exigentes (El Dakar ya no es solo aventura y no podría vivir sin los equipos oficiales y sin las grandes marcas como MINI y más ahora que va a llegar AUDI).
Repensar su forma de correr e ir a menos velocidad (algo casi imposible en Carlos Sainz que disfruta yendo rápido) o su continuidad en el propio Dakar que, como cada año, queda en entredicho. ¿Seguirá, no seguirá? Sí, tiene el proyecto de Acciona que le entusiasma, pero Sainz es muy competitivo y me atrevo a decir que se despedirá ganando, no con un simple tercer puesto.