Absorbidos por la turistificación
Hoy hablamos de turistificación y gentrificación porque los centros de ciudades como Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca o Sevilla, por poner uno pocos ejemplos, están siendo absorbidos por los turistas y el negocio que les rodea. A los vecinos de toda la vida no se les renuevan los contratos de alquiler para convertir esos inmuebles en viviendas turísticas, los comercios tradicionales se tienen que ir porque los alquileres son demasiado altos y las franquicias que se reproducen en muchas ciudades llegan en diferentes formatos para abrir una filial que se nutra de los turistas en esas zonas. Incluso, se negocian vuelos baratos para masificar las fiestas tradicionales de esos lugares y que los lugareños pierdan la esencia de una festividad íntima que fomenta barrio para convertirse en el flash de miles de móviles ajeno a esa realidad.