A las 7:50 horas del 20 de diciembre de 2000, el agente de la Guardia
Urbana de Barcelona Juan Miguel Gervilla Valladolid regulaba el tráfico
en la confluencia de la calle Numancia con la avenida Diagonal. Aquel día ayudó
a dos hombres, que resultaron ser dos etarras, empujando un vehículo que
obstaculizaba el tráfico. El automóvil se bloqueó al no tener
la llave puesta. Cuando Juan Miguel se percató de la situación, el terrorista
Fernando García Jodrá intentó sacar una pistola. Forcejearon
y cayeron al suelo. El otro etarra disparó a Juan Miguel. Pretendían
matar al periodista Luis del Olmo. Era la sexta vez que el comando Barcelona lo
intentaba.
Juan Miguel, de 39 años, nació en Nuremberg (Alemania).
Vivía junto a su esposa y dos hijos en Esplugues de Llobregat
(Barcelona), donde había residido gran parte de su vida. Era agente de la
Guardia Urbana de Barcelona desde 1986 y durante ocho años se había
encargado de regular el tráfico en Esplugues de Llobregat. Estaba
adscrito al distrito barcelonés de Les Corts desde 1994. Se le impuso la
Medalla de Honor al sufrimiento en la categoría de oro.
En Barcelona se convocó una manifestación para el día
posterior a su asesinato con el lema: “Catalunya per la llibertat. ETA no”.
Acudieron unas 150.000 personas. En homenaje y memoria de la víctima de
ETA, el Ayuntamiento de Fuenlabrada instauró una Carrera Policial que
adoptó el nombre de Juan Miguel Gervilla y que se celebra anualmente con
motivo del Día de la Policía Local.
Los terroristas Krutxaga Elezcano y García Jodrá fueron
condenados a sendas penas de 54 años de prisión. Además, debían
indemnizar conjuntamente a los herederos de Juan Miguel.