Un testigo de la defensa admite presiones de los padres del principal acusado en Alsasua para declarar
- Ha declarado ante el tribunal que los agresores "fueron a por" los guardias civiles
- También considera que han imputado a personas que "no tendrían" que estarlo
- Asegura que vio como pasaban corriendo, golpeaban al teniente y se iban
Un testigo de la agresión a dos guardias civiles y a sus parejas en Alsasua aportado por la defensa del principal acusado, Ohian Arnanz, ha reconocido este jueves en el juicio que se ha sentido "un poco" presionado por los padres de éste para ir a declarar y ha asegurado que, en su opinión, los responsables "fueron a por" los guardias civiles.
El testigo ha dicho a preguntas del abogado de las novias de los dos agentes de la Benemérita agredidos que él no quería declarar en el juicio, pero que le han insistido "los padres de Ohian". Inmediatamente el abogado le ha preguntado si se ha sentido "presionado", a lo que ha contestado que "un poco". El fiscal del caso pide para Ohian Arnanz una pena de 62 años y medio de prisión por lesiones y amenazas terroristas.
Posteriormente, el testigo ha publicado un comentario en su cuenta de Twitter en el que trata de aclarar lo declarado: "A ver, lo de que me han presionado a ir a declarar no es así, se ha interpretado mal, sólo me insistieron con todo el respeto del mundo. Sólo quería aclarar eso. No he tenido ninguna presión de nadie", ha afirmado.
A preguntas del mismo letrado durante el juicio, el mismo testigo ha reconocido que después de los hechos habló con el hermano de la novia del teniente, a quien dijo que sí pensaba que había gente que había ido "a por ellos" (a por los guardias civiles), aunque también pensaba que habían han imputado a gente que no debería estarlo, en referencia al acusado Jon Ander Cob, para quien se piden 50 años de cárcel por lesiones terroristas.
"Los sacaron a empujones del bar"
El testigo, que vive en Alsasua desde hace 16 años, era amigo de la novia del teniente de la guardia civil agredido y juega en el equipo de fútbol de la localidad, junto con otros dos acusados, Jon Ander Cob y Julen Goicoechea. Según ha relatado, vio toda la agresión y al teniente malherido, pero ha asegurado que no sabe quiénes fueron los responsables porque no les distinguió.
En su declaracón, ha explicado que estuvo en el Koxka con la novia del teniente y que ésta le pidió que acompañara a su pareja al servicio, pero no le especificó por qué. Cuando Ohian Arnanz increpó al teniente preguntándole si era "madero", el testigo ha señalado que se lo llevó de allí a otra parte del bar.
Luego, cuando "empezaron los empujones", según ha asegurado, intentó proteger a su amiga para que no la pegaran. "Los sacaron a empujones del bar", ha comentado, si bien ha dicho varias veces que no sabe quiénes fueron los responsables.
Ya en la calle, ha explicado que continuaron los golpes. Vio a personas dando patadas al teniente, que ya estaba tirado en el suelo, pero ha reiterado que no sabe quiénes fueron porque estaban "encapuchados". También recuerda que había sangre y que el guardia civil se quejaba de dolor en la pierna.
"Pasaba la gente corriendo, le propinaban un golpe y se iban", ha señalado antes de explicar que le agredían en la espalda y en el pecho. Asimismo, ha comentado que vio al sargento llorando y que tenía la camisa rota, pero no recuerda haber visto huellas de zapatos en ella.
Una camarera asegura que no percibió ningún problema
En cuanto a Ohian Arnanz, el testigo ha explicado que cuando estaba en la calle le vio salir del bar "para ver qué pasaba", pero que se lo impidió. A la pregunta de por qué lo hizo, ha contestado simplemente que le "salió así".
Al ser amigo de la novia del teniente, ha indicado que le envió un mensaje al día siguiente para saber cómo estaba, en el que le dijo que le había intentado ayudar pero no lo había conseguido, pero no recuerda si intercambió algún comentario más. También conoce los "problemas" que han tenido los padres de su amiga, que regentan un bar en Alsasua, desde que ocurrieron los hechos.
Además de este testigo, este jueves ha declarado una de las camareras que se encontraba aquella noche en el bar Koxka, la cual ha explicado que no vive en Alsasua, sino en Vitoria, y que va a la localidad sólo cuando tiene que trabajar.
Según su versión, ella permaneció siempre dentro del local y que su compañera, que ya declaró este miércoles, le comentó que había habido una pelea, pero ha asegurado que no percibió ningún problema y no vio ningún tumulto ni ninguna agresión.
También ha comparecido un guardia civil que habló con las víctimas en el hospital. En este sentido, ha explicado que primero habló con el sargento y con las novias de los dos agentes agredidos que estaban "muy nerviosos" y "decían claramente" que habían ido a por ellos.
"Al teniente le vi más tarde. Se quejaba mucho del tobillo y tenía golpes por todas partes. También decía: 'Han venido a por nosotros'", ha relatado, tras lo cual ha dicho que en ese momento el teniente sólo identificó a Jokin Unamuno porque a los demás no los conocía.