Joana Biarnés, considerada la primera fotoperiodista española, ha fallecido a los 83 años en Barcelona de un paro cardiaco, según han confirmado a Efe fuentes próximas a la familia.

Biarnés, que nació en Terrassa en 1995, fue pionera en el oficio y cubrió los principales eventos deportivo y sociales de la España del siglo XX. Inmortalizó con su cámara a grandes personajes de la historia como Salvador Dalí, Luis Buñuel, Clint Eastwood o The Beatles, a los que retrató en su visita a Madrid en 1965.

Hija del también fotoperiodista deportivo Joan Biarnés, se convirtió en la primera mujer en este oficio en España a principios de los años 60 del pasado siglo cuando entró en el periódico Pueblo, donde trabajó con periodistas como Raúl del Pozo, Jesús Hermida, Tico Medina o José Antonio Navas.

La fundación que representaba a la fotógrafa, Photographic Social Vision, resaltaba que fue una mujer "luchadora, bondadosa, coherente, humilde, generosa, inteligente, con valores y principios, justa, respetudos".

Raphael, Lola Flores, Dalí, Massiel, Joan Manuel Serrat, la duquesa de Alba, los Beatles, Audrey Hepburn, Jackie Kennedy o Roman Polanski fueron algunos de los personajes que captó con su cámara y que hace dos años formaron parte de la exposición "Joana Biarnés. A contracorriente", que pasó por Madrid, Zaragoza y Barcelona.

Las fotografías de Juana Biarnés, en 'A contracorriente'

Las fotografías de Juana Biarnés, en 'A contracorriente'

9 Fotos 1 / 9

• 

• 

Su trabajo quedó también reflejado en el libro Joana Biarnés. Disparando con el corazón, una publicación antológica y biográfica que resume la trayectoria de esta mujer, que nadó a contracorriente en un mundo de hombres, venció los prejuicios e inmortalizó a grandes personajes de la historia.

Durante la presentación de la exposición en el Palau Robert de Barcelona, en octubre de 2017, la fotógrafa consideró que sus imágenes tienen "esa mirada femenina que tienen las mujeres fotógrafas y que es distinta a la de los hombres".

Joana Biarnés abandonó la fotografía en 1985, "de un día para otro", al sentirse desencantada porque la prensa sensacionalista lo invadía todo, según explicó en el mismo acto.