Propiedades de las espinacas

Son una fuente fantástica minerales

Como ya hemos comentado, su principal componente es el agua además de que poseen escasas proporciones de hidratos, por lo que a nivel calórico su aporte será muy reducido, y una cantidad considerable de proteínas. Pero es que también son una gran fuente de otros nutrientes.

Dentro de los minerales destacan el calcio, el fósforo, el potasio, el manganeso y el magnesio. Y por si te lo estabas preguntando, sí, también el hierro. Pero, ¿es realmente uno de los alimentos que más hierro contienen? En contra de lo que nos han dicho los dibujos animados, sentimos decirte que no es así. Además, por lo general se absorbe mejor el hierro de origen animal porque es más parecido al nuestro.

Pero hay que puntualizar, eso no significa que el de origen vegetal no se absorba. Perfectamente puedes cubrir tus necesidades de hierro aunque sigas una dieta vegetariana. Incluso, en comparación con la carne, hay que valorar que las espinacas no contienen prácticamente grasas. En cualquier caso y si quieres informarte más sobre los alimentos que contienen más hierro puedes consultar este artículo en el que lo explicamos.

Y de vitaminas, fibra…

Pero es que también nos aportan vitaminas como la A, C, E, K y sobre todo las del grupo B (B6, B2, B1 y B9, el ácido fólico). También destacan por su contenido de fibra, especialmente los tallos, un motivo más para incorporarlos en nuestra dieta. Además son fuente de flavonoides, carotenoides y tienen propiedades antioxidantes y efecto antiinflamatorio.

Como ves si aún no tomas espinacas regularmente no te lo pienses dos veces. Son una opción perfecta para dietas de adelgazamiento, por su alto poder saciante y bajo aporte calórico, por su elevada cantidad de agua y reducida proporción de hidratos en comparación con las proteínas. También resulta muy interesante incorporarlas en dietas que no obtengan el calcio de productos lácteos y sus derivados, entre otros alimentos que ya os explicamos en este artículo.