España y Francia crean un comité de seguridad interior contra el terrorismo y el crimen organizado

España y Francia pondrán en marcha un comité estratégico de seguridad interior para luchar contra el terrorismo y el crimen organizado. Así lo ha anunciado el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tras reunirse con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.

Este acuerdo va a permitir a los dos paises dar "un salto cualitativo" en materia de seguridad, según ha subrayado Zapatero. El comité se reunirá cada seis meses para coordinar y planificar las acciones de las fuerzas y cuerpos de seguridad de los dos países.

Zapatero y Sarkozy se han reunido este martes en La Moncloa en el marco de la XXI cumbre bilateral entre ambos países.

Por su parte, el presidente francés, ha indicado que es lógico poner en el mismo plano la lucha contre el terrorismo y la lucha contra el crimen organizado, dos tipos de organizaciones que toman los mismos sectores.

España y Francia han reiterado su compromiso mutuo de luchar contra ETA. El presidente español ha agradecido al país vecino y en especial a su presidente por "volcar todo su empeño político y determinación en la lucha" contra la banda terrorista.

Poco antes del encuentro, en un discurso que ha dado ante diputados y senadores en el Congreso, Sarkozy ha reiterado su compromiso en esta materia y ha asegurado que Francia luchará "hasta acabar con el último asesino".

La presidencia de la "recuperación económica"

En su comparecencia conjunta, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha manifestado su intención de que la presidencia española de la Unión Europea el primer semestre de 2010 sea la de la "recuperación económica".

Y es que, la crisis económica ha sido el gran asunto sobre la mesa. Ambos dirigentes han constatado la coincidencia en el análisis y en el hecho de que ese debe ser el gran reto de la Unión Europea.

El presidente español ha recordado que la Presidencia francesa fue "un gran éxito" que achacó en gran parte al "liderazgo y determinación" de Sarkozy, por lo que ha solicitado expresamente su respaldo para ese semestre de 2010. Será "total", le ha asegurado después el presidente galo.

La española "ha de ser la Presidencia de la recuperación", ha asegurado Rodríguez Zapatero, y del desarrollo del nuevo modelo de crecimiento.

No a las recetas "perjudiciales"

Al ser preguntado por la posible necesidad de unidad nacional en cada país para hacer frente a la crisis, Rodríguez Zapatero ha reiterado que ante una crisis internacional novedosa "no valen las recetas anteriores", de modelos que se han demostrado "inútiles, cuando no perjudiciales".

De forma singular ha expresado sus recelos a "desregular" el mercado laboral cuando se están comprobando los daños de la falta de regulación financiera, y ha defendido de nuevo las inversiones públicas ante la parálisis de la inversión privada.

Ha subrayado que apenas han pasado tres meses desde la aprobación de las principales medidas, y ha pedido por ello un esfuerzo para entender que su llegada al tejido económico "necesita un tiempo".

Ambos coinciden, además, en la necesidad de un "gobierno económico" de la Unión Europea paralelo al mercado común, al euro o a la independencia del Banco Central Europeo.

España y el G-20

"El mundo necesita una España que ejerza sus responsabilidades a nivel internacional", ha asegurado Sarkozy, y el eje París-Madrid-Londres es "una convicción profunda" de Francia y además "independientemente" de quien gobierne en España.

Sarkozy ha sido contundente no sólo al defender la presencia de España en el G-20 sino al sentenciar que estará en la reunión de Nueva York como estuvo en la de Londres, porque es una de las veinte principales economías mundiales y porque no se van a modificar los participantes de entonces.

Conferencia sobre la piratería en Somalia

Rodríguez Zapatero y Nicolas Sarkozy han acordado proponer la celebración de una conferencia internacional sobre Somalia para ofrecer al país una "respuesta integral" ante la crisis que atraviesa.

Zapatero ha estimado que la respuesta no puede limitarse a frenar la piratería que se vive en aguas de la región, sino que se necesita una estrategia "amplia", que integre los medios militares con una política de seguridad civil.

El objetivo debe ser, según ha explicado, ofrecer un futuro a ese país que "preserve nuestra seguridad", para lo que es necesario trabajar de forma conjunta.