India concluye la "mayor fiesta de la democracia"
- Este miércoles votan los últimos 100 millones de indios tras un proceso de un mes
- La seguridad ha sido clave en la campaña, especialmente en Cachemira donde se vota ahora
- Los dos grandes partidos, el Congreso y el BJP deberán negociar con socios menores
- El recuento empieza el sábado, pero esta tarde se conocerán los primeros sondeos
Los colegios electorales han abierto por última vez en la India para designar a los parlamentarios que formarán el nuevo Gobierno. La mayor democracia del mundo ha celebrado las elecciones en cinco jornadas, una cada semana desde el pasado 16 de abril.
Este miércoles están llamados a votar los últimos 108 millones de electores sobre un censo total de 714. Aunque ha habido incidentes aislados, el proceso ha cumplido con el lema con el que presentó: "la mayor fiesta de la democracia".
Entre los políticos que se juegan su escaño en los nueve estados o territorios que votan en esta fase está el actual ministro del Interior, P.Chidambaram, que accedió al cargo tras la dimisión de su predecesor por los atentados de Bombay. Hasta entonces ministro de Finanzas, ha sido uno de los puntales del equipo del primer ministro Manmohan Singh (76 años), del histórico Partido del Congreso (centro-izquierda) liderado por la saga Nehru-Gandhi (nada que ver con Mahatma Gandhi).
El rebelde de este clan de políticos y polémico Varun Gandhi se presenta en cambio por el opositor partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP, derecha). Su líder es Lal Krishna Advani (81 años).
Al cierre de las urnas este miércoles se conocerán los primeros sondeos post-electorales de todas las fases, cuyo recuento se realizará el sábado 16.
No obstante, el nuevo Gobierno dependerá de las complicadas negociaciones que establezcan después estos dos partidos con numerosos grupos minoritarios necesarios para formar una mayoría en este Estado multiétnico de 1.150 millones de habitantes.
También aspira al Gobierno con menos opciones el Tercer Frente, una coalición de comunistas y grupos regionales o representantes de castas.
La seguridad será una de los principales retos para la próxima legislatura. Un importante dispositivo de seguridad ha sido desplegado en una de las últimas regiones en votar, la convulsa Cachemira, objeto de una histórica disputa con el vecino Pakistán, de mayoría musulmana.
Al margen de la difícil convivencia entre etnias, castas y religiones, el peso de las tradiciones y el hecho de que el 40% de la población vive bajo el umbral de la pobreza son los otros lastres de esta potencia emergente.