Extinguido el incendio de Ciudad Real
- Los vecinos evacuados han comenzado a regresar a sus casas
- Ocho personas tuvieron que ser ingresadas por inhalación de humo
El incendio que declarado la tarde del martes cerca de la capital de Ciudad Real ha quedado totalmente extinguido sobre las diez de la noche, por lo que las decenas de personas que tuvieron que ser desalojadas de sus casas en el núcleo de La Poblachuela y cerca de la carretera de Piedrabuena han podido regresar a sus viviendas. Ocho personas han resultado heridas por inhalación de humo, aunque sólo cuatro de ellas han permanecido ingresadas durante la noche.
El fuego, que se originó sobre las 17.20 horas de este martes en el Puente de Alarcos de Ciudad Real, que adquirió importantes dimensiones, ha afectado a una treintena de jardines de viviendas, dos naves, numerosos postes de luz, dos líneas de alta tensión y algunos vehículos, además de una gran extensión de pasto.
El incendio se propagó en un primer momento de forma muy rápido y obligó a declarar el nivel 1 por el Servicio de Extinción de Incendios de Castilla-La Mancha (Infocam). En el operativo han participado 300 efectivos de los cuerpos y fuerzas de seguridad de la Policía Local (más de 30) y Nacional (más de 40), Protección Civil, Guardia Civil, Emergencia Ciudad Real, Extinción de Incendios, además de dos autobombas del Aeropuerto Central.
El delegado provincial de la Junta de Comunidades, José Fuentes, ha explicado esta noche que el viento, que llegó a alcanzar los 60 kilómetros por horas, ayudó a la propagación del fuego, además de dificultar las tareas de extinción por la poco visibilidad en la zona y la imposibilidad de los medios aéreas de trabajar.
En una comparecencia en la que estuvo acompañado del subdelegado del Gobierno, Miguel Lacruz, y la alcaldesa de la capital, Rosa Romero, Fuentes ha señalado que el operativo empezó a trabajar "en la margen derecha", de suroeste hacia el norte, para evitar que el fuego llegara a los cercanos núcleos de población y se introdujera en la propia ciudad.
El portavoz ha reconocido que las autoridades vivieron "momentos dramáticos", ya que el incendio fue desplazándose a gran velocidad y cruzó de la carretera de Piedrabuena, a la de Porzuna y la de Toledo, por lo que hubo que cortar el tráfico en estas tres vías.
Sobre las 20.00 horas, una vez que el viento amainó, cinco helicópteros se incorporaron a las labores de extinción, mientras los efectivos terrestres estaban controlando "el interior y los perímetros de las zonas afectadas". Así, tras casi cinco horas de trabajo, a las 21,55 horas quedó controlado y extinguido el incendio a los pies de la Atalaya, por lo que no afectó al parque forestal y se retiró el nivel 1.
Los medios que participaron en la extinción del incendio fueron cinco aéreos, siete autobombas, cuatro máquinas pesadas, tres vehículos de patrulla, ocho retenes terrestres, y diez agentes de Medio Ambiente. Asimismo, trabajaron más de 20 agentes de la Policía Local, una treintena de la Guardia Civil, una cuarentena de la Policía Nacional, además de voluntarios de Protección Civil.