Los enfrentamientos entre policía y radicales islámicos dejan 206 muertos en Nigeria
- Alrededor de 200 son miembros del grupo integrista Boko Haram y el resto fuerzas del orden
- Pese al toque de queda en Maiduguri, se han oído disparos durante la noche
- Los radicales han quemado iglesias, una comisaría y una prisión
- Son contrarios a la educación occidental y partidarios de imponer la 'sharia'
- El presidente de Nigeria dice que la situación en Bauchi y Yobe está controlada
Los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los rebeldes musulmanes del norte de Nigeria en la ciudad de Maiduguri han dejado 206 muertos en los últimos dos días, la mayoría de ellos manifestantes, según fuentes policiales. El nuevo dato eleva la cifra de fallecidos, frente al centenar que se contabilizaba el lunes.
Según una fuente policial citada por AFP que quiere conservar el anonimato, el lunes se "contaron 197 cadáveres de talibanes que se han depositado en una comisaría", mientras que los radicales islamistas han acabado con la vida de nueve policías.
Anteriormente se había facilitado, por parte de la portavoz de la policía de Maiduguri, Isa Azare, la cifra de 106 muertos, de los que 90 eran miembros del grupo islámico integrista Boko Haram, mientras que ocho eran policías, tres funcionarios de prisiones y otros dos soldados. Los radicales son partidarios de un predicador integrista contrario a la educación occidental y apoyan la imposición de la 'sharia' o ley islámica en Nigeria.
Pese al toque de queda que reina en la ciudad, capital del estado de Borno, durante la noche se han oído disparos esporádicos tras los enfrentamientos, en los que los insurgentes han quemado iglesias, una comisaría de policía y una prisión, además de lanzar bombas de gasolina cerca de zonas residenciales.
Según han informado varios residentes, jóvenes armados con machetes, cuchillos, arcos y flechas y rifles de caza y explosivos de fabricación casera han atacado los edificios de la policía y a cualquiera que pareciera policía o funcionario del Gobierno, lo que ha provocado la huida de cientos de familias, mientras otros miles permanecen refugiados en cuarteles. La situación, "bajo control", según el presidente
Por su parte, el presidente de Nigeria, Umaru Yar'Adua, ha asegurado que la situación en el norte de Nigeria está bajo control.
"La situación está controlada en Bauchi y Yobe. La mala situación que tenemos ahora es en Borno, donde residen los líderes del grupo... Vamos a lanzar una operación para desalojarlos, ha dicho a los periodistas.
"Acabo de terminar la reunión con todos los jefes de servicio de este asunto... Les aseguro que la situación ha sido controlada", ha afirmado en Abuja, la capital, antes de viajar por un período de tres días de visita oficial a Brasil.
La ONU condena las muertes
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha condenado la "innecesaria pérdida de vidas humanas" en Nigeria, según ha dicho el portavoz de la ONU, Farhan Haq, que ha añadido que Ban espera que se identifique y procese a los responsables de los ataques llevados a cabo desde el domingo por el grupo islámico integrista.
El secretario general de la ONU "condena la innecesaria pérdida de vidas humanas y destrucción de la propiedad causadas por los ataques de los militantes", señaló Haq en una conferencia de prensa.
El portavoz agregó que Ban insta al Gobierno nigeriano, las autoridades policiales y la sociedad civil a que aborden las "causas profundas de los frecuentes enfrentamientos religiosos en Nigeria para que se encuentran soluciones a través del diálogo, la tolerancia y el entendimiento".
Un conflicto religioso
El conflicto estalló en el estado de Bauchi, cuando los insurgentes intentaron atacar una comisaría policial y tras la detención de varios miembros del grupo Boko Haram. La secta, también conocida como 'los talibanes', tiene posibles vínculos con los terroristas de Al Qaeda. El objetivo que persiguen es instaurar un "Estado islámico puro" en el norte del país, donde los conflictos religiosos así como políticos y territoriales son frecuentes.
A continuación, se extendió a los estados de Borno, Yobe y Kano, todas ellos situadas en el norte de Nigeria, dominado por musulmanes.
Más de 10.000 personas han muerto en Nigeria en enfrentamientos entre grupos musulmanes y cristianos y las fuerzas de seguridad desde 1999, cuando se implantó la "sharia" en doce estados norteños de los 36 del país.
Maiduguri es el hogar de Mohammed Yusuf, líder de Boko Haram -que se traduce al castellano como "la educación está prohibida" - y la ciudad parece haberse llevado la peor parte de los disturbios.
Los habitantes de Maiduguri aseguran que los seguidores de Yusuf son en gran parte analfabetos y jóvenes estudiantes desempleados que han dejado la universidad para apoyarle, pero afirman que sus ideas son rechazadas por la mayoría de los líderes musulmanes de la ciudad.