Los trabajadores de Spanair celebran su segunda jornada de huelga contra su traslado a Barcelona
- La huelga, de carácter indefinido, prevé movilizaciones los lunes y los viernes
- Está previsto que los empleados se manifiesten frente a la sede de la compañía
- Los trabajadores se oponen al traslado de Palma de Mallorca a Barcelona
- El pasado viernes se celebró la primera jornada de esta huelga
Los trabajadores de la compañía aérea Spanair celebran este lunes su segunda jornada de huelga indefinida en contra del traslado de sus empleados a Barcelona y que desde el pasado 7 de agosto prevé movilizaciones los lunes y los viernes.
Los empleados han organizado dos sentadas en la explanada de la sede de la compañía, en Palma de Mallorca. La primera se ha celebrado esta mañana a las 07:45 horas mientras que la segunda tendrá lugar a las 18:30 horas.
Tras la primera jornada de huelga, que tuvo lugar el viernes, la dirección de Spanair ha mostrado su disposición a "mejorar" la indemnización de 20 días por año trabajado durante 12 mensualidades ofrecida en un primer momento a los trabajadores de Palma que no deseen acogerse a los traslados a Barcelona.
El pasado viernes en torno a 200 trabajadores se manifestaron en el aeropuerto bajo el lema '60 días bastan para destruir 20 años de dedicación. Por todos los puestos de trabajo en Palma'.
La presidenta del Comité de Empresa de Spanair en Palma, Eva Marín, ha asegurado que durante la primera jornada de huelga, que tuvo unos servicios mínimos decretados del 47% de la plantilla, causó la cancelación de un vuelo entre Barcelona y Madrid y 19 retrasos "entre una y tres horas".
La huelga se opone a la posición de los nuevos propietarios de Spanair, un grupo de empresarios catalanes liderados por Ferrán Soriano, quienes quieren el traslado de la compañía a la Ciudad Condal.
Según Eva Marín, la nueva dirección se niega a aceptar la petición de los trabajadores de aplazar los traslados durante seis meses y orientar las negociaciones hacia un ERE, con el fin de mejorar las condiciones de los empleados que no quieran el traslado y decidan rescindir voluntariamente sus contratos.