Libertad bajo fianza para el detenido en la manifestación ilegal de San Sebastián
- Fue detenido por proferir gritos contra ETA y atentado contra la autoridad
- Participaba en una manifestación de la Izquierda Abertzale que había sido probibida
- Garzón le ha dado cinco días para abonar una fianza de 6.000 euros
El juez Baltazar Garzón ha dejado este lunes en libertad bajo fianza al hombre detenido el pasado sábado en San Sebastián cuando la Ertzaintza intentó impedir la celebración de una manifestación de la Izquierda Abertzale que había sido prohibida por el Gobierno Vasco y por el magistrado de la Audiencia Nacional.
Garzón ha tomado esta decisión a instancias de la Fiscalía y tras tomar declaración al detenido, Mariano Pedro Ordóñez Canti, de 54 años, a quien el magistrado acusa de enaltecimiento del terrorismo por lanzar gritos a favor de ETA y de atentado contra la autoridad por oponerse a su detención.
En su auto, Baltasar Garzón da al detenido cinco días para abonar su fianza y así eludir su ingreso en prisión. Además, le ha impuesto la obligación de comparecer quincenalmente en el juzgado y le ha prohibido abandonar España.
El juez destaca "la gravedad de los hechos" y "la frecuencia de acciones similares en apoyo de una organización terrorista que comete delitos gravísimos contra la vida y el patrimonio público y privado",
Gritos a favor de ETA
Según el magistrado, Ordóñez Canti encabezaba la manifestación gritando 'Gora ETA' y dirigiendo los insultos de los manifestantes a la Policía.
Garzón también ha reflejado que el detenido "atacó a los agentes abalanzándose sobre ellos golpeándoles con las manos", por lo que tuvo que ser reducido.
Sin embargo, durante su declaración el detenido, que ha comparecido con su abogada de confianza, ha negado haber proferido estos gritos y haber forcejeado con los agentes para evitar su arresto, en la calle San Lorenzo.
Ordóñez se encontraba a la cabeza de la manifestación prohibida, llevando el cartel con el lema de la marcha: "Salbuespen Egoerari Stop/Stop al estado de excepción" y "dirigiendo los insultos contra la Policía".
Según el juez, los manifestantes profirieron gritos de "Gora ETA", "Independentzia", "Euskal Presoak", Eukal Herrira" y contra los agentes de la policía a los que dirigían gritos de "Txakurrak", "Entzun (escucha) Pim, Pam,Pum" o "Alde Hemendik" (fuera de aquí).
Todo esto demuestra que el acto había sido convocado para ensalzar y apoyar a ETA, "asumiendo asimismo el carácter violento de la manifestación, por cuanto estando prohibida, la fuerza pública tenía obligación legal de impedir su celebración", indica el juez.
Junto a Ordóñez fue detenido otro manifestante, que ayer fue puesto en libertad con cargos, ya que deberá responder a la imputación de haber participado en una manifestación ilegal.
Manifestación prohibida
La manifestación había sido convocada por la izquierda abertzale para las 17:30 horas con lemas en favor de la independencia, pero el departamento vasco de Interior decidió prohibirla.
Tras conocer la prohibición, la izquierda abertzale decidió desconvocar la marcha y organizar otro acto una hora después, a las 18:30 horas.
Esta segunda convocatoria también fue prohibida por Interior y Garzón dictó el sábado un auto prohibiendo las marchas que pretendiera celebrar ese día la izquierda abertzale en San Sebastián, al considerar que esas "iniciativas responden a una misma estrategia" del entorno de ETA bajo "la que se oculta en realidad la ilegalizada Batasuna".
Pese a todas estas prohibiciones, los radicales intentaron celebrar la marcha, y los manifestantes trataron de salir del Boulevard sin pancarta y portando carteles en los que se podía leer el lema en euskera "Stop estado de excepción. Euskal Herria autodeterminación".
Esto provocó que la Ertzaintza tuviera que efectuar varias cargas policiales para disolver esta manifestación ilegal cuyos participantes se dispersaron por las calles de la Parte Vieja de la capital guipuzcoana.