Los jueces defienden la actuación de Velasco y Garzón en el caso de la etarra Aranalde
- Los magistrados creen que sus decisiones fueron jurídicamente irreprochables
- La etarra huyó tras quedar en libertad bajo fianza adoptada por Velasco
- Las asociaciones sí creen que hubo "disparidad" en las actuaciones de los jueces
Las asociaciones de jueces han denfendido este miércoles la actuación de los magistrados Eloy Velasco y Baltasar Garzón en el caso de la etarra Maite Aranalde, que huyó tras quedar en libertad bajo fianza.
Aranalde había sido extraditada previamente desde Francia y se encontraba en libertad condicional por un error judicial francés.
Los jueces creen que las decisiones de los magistrados españoles fueron "jurídIcamente irreprochables" y que tanto la libertad bajo fianza adoptada por Velasco como la prisión incondicional decretada por Garzón eran "posibles" por lo que han pedido "cautela" y que se eviten "juicios precipitados" sobre estas decisiones judiciales.
Además, las asociaciones han recordado la independencia profesional de los magistrados.
"Juego arriesgado"
El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Antonio García, ha definido como "un juego extraordinariamente arriesgado" enjuiciar las decisiones de los magistrados "desde la desinformación" y sin conocerse por completo las circunstancias que condujeron al dictamen emitido por Velasco.
"Meterse en un juego sobre las actuaciones de Garzón o Velasco es extraordinariamente arriesgado y en su caso si se considera digno de examen debería hacerlo la institución que tiene las competencias sancionadoras, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ha indicado García, quien ha reclamado "cautela" al anticipar juicios de valor si no se conocen los pormenores de la resolución.
No obstante, la APM ha subrayado que el hecho de que la misma Audiencia Nacional adopte primero una decisión y "48 horas después otra contraria" supone una "disparidad", una "falta de coordinación", una "divergencia" y una "inseguridad evidente" sobre todo en temas "tan extraordinariamente delicados".
Por ello, ha pedido un esfuerzo en "unificar" criterios para introducir "factores de certeza y predecibilidad", aunque siempre garantizando la función independiente de los magistrados.
Decisión ajustada a derecho
Por su parte, el portavoz de la Asociación de Jueces Francisco de Vitoria (AJFV), Marcelino Sexmero, ha lamentado la huida de Aranalde aunque ha subrayado que la libertad bajo fianza impuesta por Velasco fue "jurídicamente adecuada e irreprochable" y acorde a las circunstancias del momento.
"Por muy etarra que sea, la decisión era posible y es ajustada al derecho", ha indicado, para defender que ambos jueces tomaron sus decisiones en función de "unos principios y criterios admisibles".
Preguntado si podría haberse impuesto un seguimiento policial entre las medidas cautelares, Sexmero ha respondido que cabía esa posibilidad pero que la Policía "podía haber adoptado medidas de vigilancia sin necesidad de autorización judicial cuando no fueran coaccionantes".
Además, ha rechazado una delimitación de los criterios a la hora de fijar estas decisiones porque "violaría la independencia judicial" y pertenece al ámbito penal y no, ha dicho, a una cuestión meramente administrativa.
La decisión "no fue extravagante"
Desde la Asociación Jueces para la Democracia (JpD) su portavoz, Miguel Angel Gimeno, ha afirmado que las críticas a posteriori son muy fáciles de hacer y ha remarcado que Velasco llegó a la conclusión de que no había riesgo de fuga al adoptar una decisión que "no fue extravagante". Así, ha indicado que "no debe sorprender" que haya dos resoluciones distintas por los mismos hechos y ha añadido que es algo que ocurre "con frecuencia".
"Una persona que pertenece a una organización de esta naturaleza y que tiene una actividad todavía viva, que es lo que dice Garzón, es fácil que quiera continuar en la actividad pero hay que ver si en aquel momento con los datos que tenía --Velasco-- actuó o no correctamente", ha concluido.