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Software y videojuegos: aquí nació la piratería digital

  • Los fabricantes de software y videojuegos exigen más dureza
  • Sólo en videojuegos, se pierden unos 100 millones al año por la piratería

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Lineales de venta del nuevo Windows 7
Lineales de venta del nuevo Windows 7

Un 43% del software en España es pirata

En el mundo, la tasa decae y se sitúa en el 52%

La piratería crece más en los países en desarrollo

Mucho antes de que nadie pensara en descargarse música o películas de Internet ya se pirateaban videojuegos y software. Son, probablemente, el origen del problema de las descargas ilegales y, en algunos casos, llevan sufriéndolo desde que se copiaban las cintas de los vetustos Spectrum.

Hoy en día, España tiene una poderosa musculatura  tanto en la industria del videojuego como en la del software. Pero, desde luego, destaca la primera, la de los juegos para ordenador o videoconsola. Carlos Iglesias, secretario general de la Asociación Española de Distribuidore y Editores de Software de Entretenimiento, AEDESE, principal patronal del sector, explica que nuestro país es el cuarto de europa en consumo de videojuegos y que lleva años atrayendo empresas de edición y distribución de videojuegos. De hecho, algunos de los juegos más importantes del mundo se están produciendo ahora mismo en España, como el caso de Castlevania, que está en manos de la empresa madrileña Mercury Steam. Pero, además, la industria mueve unas cifras que rondan los 1.450 millones de euros anuales de facturación. Y, por dar algún dato más, España cuenta con unos 10,4 millones de personas que se declaran "videojugadoras", un millón y medio más que en 2006.

Más que la música y el cine juntos. Según la Asociación de promotores y editores, uno de cada tres hogares españoles tiene una consola para jugar.

Carlos Iglesias indica que el daño que está haciendo la piratería al negocio de los juegos es muy grave. "Al menos 100 millones de euros se pierden anualmente en España. Es tan sencillo como decir que la ilegalidad supone la mitad de lo legal, es decir, circulan unos 20 millones de unidades ilegales cada año, a 5 euros por unidad, tirando bajo, ya son 100 millones de euros", explica.

Para este 2009 que está terminando, los fabricantes y distribuidores de videojuegos esperan un repunte de las ventas en la recta final. En todo caso, de producirse, serviría para enjugar los malos datos de la primera mitad del año y, por tanto, para cerrar la temporada sin crecimiento, en el mismo nivel de ventas de 2008 y 2007.

A favor de la disposición del Gobierno

El portavoz de ADESE se muestra claramente favorable a la disposición que prepara el Gobierno para autorizar el cierre de las webs que faciliten descargas de contenidos sujetos a derechos de autor. "La gente no se da cuenta de que un procedimiento de este tipo, por vía judicial, lleva tanto tiempo que para cuando hay sentencia el daño ya está hecho y los contenidos ni siquieran están ya en la red", asegura Iglesias para defender el cierre expeditivo de webs que propone el Ejecutivo de Zapatero.

Pero, además, este directivo apunta a otra de las "patas" del conflicto, las operadoras telefónicas. "Son un factor determinante en este proceso. Saben dónde se hacen las descargas y pueden contribuir a que este proceso se frene", explica. "Creo que tienen mucho que decir a la hora de participar en una alternativa a la situación actual y, en cambio, su objetivo no parece ese, sino que se centran en vender más conexiones de  ADSL,  dando unas velocidades bajas a precios elevados, y sugiriendo a los clientes quee la descarga es algo atractivo para contratar más servicios".

"España es el país más pirata de Europa"

Iglesias explica que su sector trabajar en iniciativas importantes para construir una plataforma de descargas legales, pero es pesimista: "Es difícil que el que está acostumbrado a no pagar pase a descargar legalmente por poco dinero si puede seguir teníendolo ilegalmente". "Y es que España es el país más pirata de Europa", recuerda este directivo que señala que países como Francia, con un nivel de piratería mucho menor, son mucho más duros que España ante las descargas.

El software, por mejor camino

La piratería de software, de programas informáticos, es otra vieja conocida. Desde aquellos primeros programas que se copiaban en disquetes a las descargas por internet median sólo 15 años, pero en este tiempo las cosas han cambiado mucho.

Hoy en día, el software ilegal está en mínimos históricos en España, pero, aun así, todavía un 43% de los programas de ordenador son ilegales. Aun así, el índice apunta hacia abajo y, poco a poco, retrocede. Sin embargo, España todavía está muy por encima de la media europea, que sitúa el porcentaje de software pirata en un 35%.

Pleito P2P

El software de código libre y los programas en red, de acceso gratuito, están logrando que, poco a poco, se utilice menos software pirata. Además, las inspeccione del Ministerio de Industria y de las fuerzas del orden también ayudan a mejorar la situación.

Aun así, el sector tiene problemas con la piratería y los denuncia. Martín Pérez, presidente de ASIMELEC, la patronal de las empresas de las tecnologías de la información, comunicaciones y electrónica, considera que ¿hay que buscar a través de la cooperación entre todos los agentes económicos implicados, nuevos modelos de negocio para la explotación de los contenidos digitales en la red, que garanticen la propiedad intelectual y la sostenibilidad de la industria cultural¿.

La patronal cree que la situación creada entre la sociología del usuario de la red y los derechos de propiedad intelectual de autores ha llegado a un punto que exige un cambio profundo de los modelos de negocio de los contenidos culturales actuales, ya que "queda bien demostrada la inviabilidad del mismo".

En esta asociación aseguran que el conflicto que plantea la protección de la propiedad intelectual en la red, no es únicamente un problema legal, sino que debe de tener en cuenta los usos y las tendencias de acceso a los contenidos de los usuarios de la red. En este sentido, ASIMELEC cree que cualquier intento de solucionar la situación limitándose a medidas restrictivas no solucionará la situación, sino que por el contrario enfrentará de manera aún más radical a los usuarios con la industria y con la administración pública.

Buscando soluciones inteligentes

Lo que dice Martín Pérez es la clave: hacen falta soluciones que permitan la conviencia. Fabrizio Ferri,  editor de contenidos para España de la empresa Softonic, cree que hacen falta opciones a buen precio, o incluso gratis, que permitan a los usuarios cubrir sus necesidades básicas. Y cree que se puede ganar dinero al mismo tiempo. Un buen ejemplo es la propia Softonic, que distribuye por Internet software muy barato o gratis merced a acuerdos firmados con los editores de esos programas.

"Cuando el autor contacta con nosotros, colaboramos con él, contactamos para verificar cuál es su interés, qué promoción quiere hacer¿ Intentamos esforzarnos con él para que esté a gusto en el escaparate de Softonic", explica Ferri.

Desde luego, este directivo no está a favor de que se puedan cerrar o webs o prohibir accesos sin que un juez lo dictamine. "Hay que seguir los cauces de la ley y mirar si hay detrás ánimo de lucro con esos derechos de autor", explica. Y va más allá: "Si una web ofrece una descarga ilegal de un programa pirateado, esa página está incumpliendo la ley, y un juez debe dictaminar el cierre. Pero si sólo se pone un enlace, creemos que eso no es delictivo. Sería ridículo".

Ferri hace una descripción bastante positiva de la evolución del mercado de software en España. Cree que, aunque todavía es un país bastante aficionado a piratear, los índices van a la baja "sobre todo porque la gente está un poco cansada de tener programas que fallan, quieren soporte, tienen miedo a las inspecciones".

A largo plazo, le cuesta hacer un pronóstico, pero tiene claro que "cada vez hay menos usuarios que piratean gracias a que el auge de las plataformas de distribución digitales legales hace que la piratería baje, a lo que se suma una mayor calidad en las conexiones de internet y el imparable crecimiento del software libre.