Lemoniez explora el lujo oculto de la mujer real
El diseñador Fernando Lemoniez ha sido el encargado de cerrar la cuarta jornada de la Cibeles Madrid Fashion Week y para ello ha subido a esta 51 edición a una mujer real, cómoda e intimista pero que también destila ese lujo oculto del que sólo ella sabe disfrutar. Su propuesta ha sido muy aplaudida.
Para lograr esa armonía, el diseñador donostiarra ha desplegado por la pasarela toda una amplia paleta cromática con predominio del beige, rosa pálido, berenjena, visón y también algo de marfil.
El negro, muy predominante en la colección, protagoniza las siluetas más seductoras y elegantes, incluso mezcladas algunas de ellas con amarillo monopolizan la belleza eterna en la mujer para el próximo otoño-invierno.
El creador ha propuesto texturas fluidas o controladas, mates o brillantes, con crepés, fieltros de lana, tafetas y cloqués. Tejidos nobles de gran calidad que permiten depurar al máximo el corte de los patrones que carecen a su vez de ornamentaciones superfluas, los botones abrochan y los pliegues modelan la figura.
Elegantes vestidos de noche y generosos escotes
Vestidos de noche hasta las rodillas, algunos con aperturas imposibles, otros muy largos rozando el suelo e incluso elegantes trajes con falda y chaqueta constituyen la oferta más elegante del diseñador.
Sensuales espaldas al aire y generosísimos muy generosísimos escotes también se han visto en un mini desfile que apenas ha llegado a los 15 minutos de duración.
Pero lo más aplaudido y agradecido por el abarrotado público han sido sin duda los elegantes, gruesos y cómodos abrigos de piel de una y dos piezas para el próximo otoño-invierno.
Jean-Michel Frank, su inspiración
La gran inspiración del modisto guipuzcoano para su propuesta ha sido la exposición 'Jean-Michel Frank', en la Fundación Pierre Berge-Yves Saint Laurent.
Frank era un diseñador francés de interiores que precisamente destacó por crear muebles suntuosos fabricados con materiales de lujo.
¿Y los complementos? Sobrios. Algún colgante, algún que otro cinturón y los zapatos siempre negros y de aguja corta. Una vez más realismo y lujo en una misma propuesta.