Propuestas dispares y un denominador común, el negro, en la última mañana de Cibeles

• Ion Fiz y Maria Escoté han abierto la pasarela
• María Barros y Teresa Heldbig, protagonistas del segundo desfile doble del día

Desfile de María Escoté en Cibeles Madrid Fashion Week 2010

Ion Fiz dibuja una colección tenebrosa, inquietante y, a veces, fantasmagórica. Barroco en exceso, su pincel impregna todo con tonos empolvados, negro y dorado en diferentes texturas.

El diseñador vasco ha jugado en su colección para el próximo otoño-invierno con la piel, el metal y el brillo del dorado en bolsos, zapatos y cinturones. Todo ello al rimo de "Las cuatro estaciones" de Vivaldi.

La primera parte es muy americana y televisiva. Gasas retorcidas, faldas con bolsillos y juegos de solapas se van oscureciendo con un halo negro que lo llega a cubrir todo.

La lencería es protagonista y el abuso de las transparencias muestra una debilidad que aporta tristeza a unas prendas que parecen dormir en el fondo de un baúl de un viejo teatro.

La pasarela sobre dos ruedas

La colección de María Escoté huele a gasolina, y está inspirada en el mundo de las dos ruedas, especialmente en los Ángeles del Infierno que cabalgan a lomos de su único amor: su Harley.

Como en las cazadoras de los moteros, las prendas llevan cremalleras, remaches, tachuelas y cordones para ajustar en el brazo.

El "águila calva" marca la colección.  Su cabeza blanca y su pico agresivo se pasean abrazando algunas prendas o reflejada en estampados dibujados con sus plumas.

Sueños en blanco y negro

Onírico sueño el de María Barros. Las siluetas bien definidas se cruzan con líneas  caprichosas y volúmenes ensoñadores creados con pliegues, plisados, fruncidos y volantes que restan rigidez a una colección en blanco y negro.

Llaman la atención las hombreras con plumas y las prendas en rojo, muy bien elegidas: una chaqueta, un pantalón y unos zapatos. Misteriosos, como el vestido palabra de honor que permite esconder los brazos en el escote.

Veteranía de estreno en Cibeles

Teresa Helbig es la primera vez que presenta su ropa en una pasarela importante aunque es una veterana en la moda y ya desfiló en el 080 de Barcelona.

En esta colección introduce  aplicaciones de ante y piel, borda con cristales, utiliza bambulas, y quema con la llama de una vela organzas de seda para conseguir un efecto sorprendente.

Esta artesana de la moda, cose con aguja tímida pero con poderío de Alta Costura.