La crisis griega se agrava con tres muertos durante la huelga general contra los recortes

• Tres empleados han fallecido en un incendio de una oficina bancaria
• Papandréu ha condenado las muertes y ha justificado el ajuste fiscal
• El presidente griego asegura que el país está "al borde del abismo"

Enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía durante la huelga general en Grecia

La crisis griega se ha agravado con la muerte de tres personas en Atenas durante los enfrentamientos con cócteles incendiarios entre la Policía y grupos de manifestantes ocurridos durante la jornada de huelga general contra las medidas de austeridad del Gobierno griego, que ha tenido una masiva respuesta.

Los fallecimientos se han producido en el incendio de una sucursal bancaria que fue atacada con artefactos incediarios por los manifestantes. El fuego dejó atrapado a un grupo de 24 personas en una oficina del Banco Marfin, en el centro de la capital griega. Fuentes policiales señalan que los bomberos acudieron a rescatar a las personas atrapadas por el fuego, que se cree pudo ser provocado por la explosión de un cóctel molotov.

Los fallecidos son tres empleados de la sucursal bancaria, dos mujeres y un hombre, que trataron de escapar del fuego propagado en la planta baja del edificio, y subieron hasta el tercer piso, donde murieron asfixiados. Una de las mujeres fallecidas estaba embarazada de cuatro meses.

Una cuarta persona ha resultado herida de extrema gravedad al lanzarse desde un balcón para huir del fuego. Los sindicatos de banca ya han convocado a una huelga este mismo jueves para protestar por las muertes.

Los medios locales también han informado de enfrentamientos en la ciudad  de Salónica, donde unas 30.000 personas han participado en  las protestas, así como en las localidades de Patras y de  Loanina. La Bolsa de Atenas, mientras tanto, ha vuelto a sufrir otra severa caída, del 3,9%.

En todos los disturbios registrados por el país, 45 personas han resultado  heridas, entre civiles y policías, y han sido atendidas en los  hospitales locales que, a pesar de secundar la huelga general,  atendieron las urgencias.

Esta huelga general es la cuarta que vive Grecia en lo que va de año y, según los sindicatos convocantes, ha sido la mayor movilización de los últimos 35 años.

Condena de Papandréu

Los cuerpos de seguridad han estado en "máxima alerta" hacia el mediodía, cuando unas cien mil personas, según fuentes sindicales, 25.000 según la Policía, se han concentrado en la plaza Syntagma de Atenas, en lo que se ha convertido en un verdadero asedio al Parlamento griego, en cuyos alrededores los agentes antidisturbios han respondido con gases lacrimógenos y bombas de ruido a los ataques con piedras y botellas por parte de grupos de enmascarados.

Los participantes en la protesta han enarbolado pancartas con lemas contra los organismos internacionales que han concedido la ayuda financiera a Grecia y han coreado consignas contra el Gobierno, que ha anunciado duras medidas de ahorro para reducir el déficit y la deuda. A primera hora de la tarde, en cualquier caso, el orden se había restablecido en el centro de Atenas, según informa Radio Nacional.

Cuarta jornada de huelga en Grecia

En el interior del Parlamento, el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, ha condenado la muerte de los tres empleados de banco: "La violencia lleva a la violencia", ha declarado Papandréu en el Parlamento, consternado por lo que ha llamdo "una tragedia" y "el asesinato de tres conciudadanos". Antes, la cámara había guardado un minuto de silencio en memoria de los  tres fallecidos.

"El gobierno comparte los sentimientos de los jubilados y de los asalariados que ven reducidos sus ingresos, pero lo hacemos para que haya un futuro". Así, Papandréu ha justificado ante los diputados los recortes aplicados por un programa de ahorro que pretende reducir el enorme déficit fiscal, del 13,6% en 2009, que, junto con la elevada deuda, ha llevado al país al borde de la bancarrota, y dijo que "la otra solución era el empobrecimiento del país y de los ciudadanos".

Al borde del abismo

Por su parte, el presidente del país, Carolos Papúlias, ha advertido este miércoles que "el país ha llegado al borde del abismo" en el discurso en el que ha condenado los hechos que han provocado la muerte de esas tres personas.

"Ahora está en nuestras manos si damos el salto al vacío", ha añadido el jefe de Estado, a la vista de esos trágicos acontecimientos.

Todos los partidos políticos de la oposición griega también han condenado el ataque con bombas incendiarias contra la sucursal bancaria que generó las llamas que causaron la muerte por asfixia de dos mujeres y un funcionario de la entidad.

Transporte paralizado

La huelga general, convocada por los sindicatos mayoritarios, ha paralizado la totalidad del tráfico aéreo, marítimo y ferroviario. Es la primera huelga general que se celebra después de la presentación el pasado domingo de un paquete de ahorro de unos 30.000 millones de euros en tres años, y el cuarto paro general en lo que va de año. 

Los funcionarios civiles se oponen a la reducción de los sueldos para los funcionarios públicos, la eliminación de dos pagas extraordinarias anuales y el recorte de las pensiones. No obstante, el proyecto de ley del programa de austeridad será tramitado mañana en el Parlamento y era la condición previa para que Grecia recibiera la ayuda de 110.000 millones de euros del Eurogrupo y del Fondo Monetario Internacional (FMI).

La legislación supone aumentos de los impuestos sobre tabaco, alcohol, los productos de lujo y la gasolina, ya efectivos desde ayer, así como el incremento del IVA a partir del 1 de julio en dos puntos, del 21 al 23%. Además, permitirá aumentar el número de despidos mensuales del 2% actual al 4% en las empresas del sector privado y liberalizar los despidos.

También participan en las protestas periodistas, abogados, empleados bancarios, trabajadores industriales y los médicos de los hospitales públicos, mientras que los docentes continuarán por tercer día consecutivo sus protestas. El sindicato de empleados civiles Adedy y la confederación general de trabajadores Gsee ha calificado las medidas como "muy severas e injustas socialmente". Ambas organizaciones ya han anunciado más movilizaciones la próxima semana.