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Los sindicatos trasladan a Zapatero su rechazo a los recortes, pero no convocan una huelga general

  • Toxo y Méndez afirman que el ajuste fiscal va a elevar el paro
  • Advierten, además, de que perjudicará al diálogo social
  • Confirman las movilizaciones de funcionarios, con una huelga el 2 de junio

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A los sindicatos no les gustan los recortes anunciados por Zapatero para reducir el déficit

La reunión en La Moncloa entre los líderes de los principales sindicatos y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no ha servido para calmar el rechazo que ha suscitado en las organizaciones sindicales el paquete de recortes fiscales anunciado este miércoles, si bien no se han decidido a convocar una huelga general.

Los secretarios generales de UGT, Cándido Méndez, y CC.OO.,  Ignacio Fernández Toxo, han estado reunidos con el líder del Ejecutivo durante dos horas en las que le han trasladado que la reducción de los sueldos de los funcionarios y la congelación de las pensiones retrasarán el crecimiento y elevarán el paro, por lo que a su juicio ha elegido "la peor de las vías" para reducir el déficit, acusándole de "dar respuesta a las exigencias de los mercados financieros".

Ambos han criticado que Zapatero cargue el ajuste fiscal en el recorte del gasto y no haya tomado ninguna medida para mejorar los ingresos públicos, al tiempo de que advertían de que la aprobación de las medidas puede perjudicar al diálogo social, pese a  su disposición a seguir negociando.

Movilizaciones

Por ello, los líderes sindicales han anunciado la convocatoria de protestas contra esas medidas, centradas inicialmente en movilizaciones de los funcionarios, y aunque no han descartado una huelga general, se han remitido a sus respectivos órganos de dirección a la hora de plantearla: "No tenemos dudas, lo que tenemos es organos de decisión democratica donde debemos analizar el nivel y el alcance de la respuesta sindical", ha asegurado Cándido Méndez.

Vamos a defender los intereses de la gente que representamos

"Sería fácil convocar una huelga general, cubrir el expediente y contribuir al deterioro de la situación del país", ha argumentado Toxo, que también a aludido a la posibilidad de "hacerle el juego a alguien", en referencia al Partido Popular, pese a que ha insistido en que "no se descarta ningún escenario". "Vamos a defender los intereses de la gente que representamos", ha recalcado.

Las directivas de ambos sindicatos se reunirán este mismo viernes para analizar esa respuesta sindical y, por lo tanto, decidir si finalmente recurren a una convocatoria general de huelga.

Quiebra de la confianza

"Le hemos reiterado nuestra disconformidad absoluta con el contenido y la orientación" de las medidas, ha resumido Toxo, señalando que Zapatero "ha elegido la peor de las vías, en un momento en el que la crisis no ha sido todavía superada, para dar respuesta a las exigencias de los mercados financieros".

"Más allá del daño material hay un daño importante a la confianza entre el Gobierno y las organizaciones sindicales", ha comentado el líder de CC.OO., que ha aludido a la ruptura del pacto alcanzado para subir los salarios de la función pública un 0,3% en 2010 y a la congelación de las pensiones, que ha calificado de "golpe al Pacto de Toledo".

En la misma línea se ha expresado Méndez, que ha hablado de dos "víctimas" indirectas de las medidas: el diálogo social en la función pública y "la quiebra del discurso político de Zapatero", en referencia a la promesa repetida del presidente del Gobierno de no efectuar recortes sociales.

Todo es recorte, recorte y recorte, sin opciones para recuperar ingresos

Ambos han reclamado que el ajuste fiscal no sólo se plantee desde el gasto, sino que también se contemple mejorar los ingresos públicos. "Todo es recorte, recorte y recorte, sin opciones para recuperar ingresos", ha comentado Méndez, mientras Toxo lanzaba alternativas concretas: recuperar el impuesto de patrimonio, una subida del IRPF para las rentas más altas y aflorar economía sumergida.

Méndez también ha expresado sus dudas de que las medidas anunciadas sean capaces de reconducir la situació: "Ni se va resolver el problema del paro ni van a ser suficientes contra el déficit", ha comentado.