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Zapatero se compromete con Revilla a tomar una decisión sobre el AVE antes del 20 de julio

  • Reunión en Moncloa entre el presidente cántabro y el del Gobierno central

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El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha garantizado este lunes al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que antes del 20 de julio le expondrá la decisión del Ejecutivo sobre la llegada del tren de alta velocidad a esa comunidad y el trazado del mismo.

Este compromiso ha sido trasladado por Zapatero a Revilla en el transcurso de la entrevista que ambos han mantenido esta tarde en el Palacio de la Moncloa.

A la salida de la reunión, Revilla ha informado a los periodistas de ese plazo dado por el presidente del Gobierno, ha esperado que la decisión sea positiva para su región porque ha dicho que confía en Zapatero, y ha subrayado que, en caso contrario, el jefe del Ejecutivo "ya sabe lo que va a pasar".

"Litigio grave"

La tensión se incrementó el pasado mayo, cuando el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, del PRC, dio un  plazo de un mes al PSOE para retomar la construcción del AVE  Palencia-Santander con la advertencia de que, de lo contrario, rompería  el pacto de Gobierno que ambos partidos mantienen en la  comunidad autónoma desde 2003.

Revilla pidió a los socialistas cántabros que "se rebelen  contra la ignominia" que, a su juicio, supone paralizar las  obras del AVE a Santander, que son las más retrasadas de toda las  capitales de la Cornisa Cantábrica, e incluso amenazó con tomar  otro tipo de medidas más contundentes.

La reacción de Revilla estuvo motivada por la decisión del Ministerio de  Fomento de suspender la colocación de la primera piedra del AVE a  Cantabria, prevista inicialmente para ese mismo mes.

Revilla ha considerado ahora como un "litigio grave" la paralización de esas obras del AVE a Cantabria y ha calificado de "sorprendentes" las declaraciones del ministro de Fomento, José Blanco, sobre la posibilidad de cambiar el trazado del tren.

Según el presidente cántabro, Rodríguez Zapatero ha escuchado con "detenimiento" la posición del Gobierno y será el jefe del Ejecutivo quien tenga la responsabilidad de dar una solución a partir de ahora.

"El tema ya no está en una discusión de Cantabria con el señor Blanco, sino con el señor Zapatero, que es quien asume el protagonismo para dar una solución a este tema", ha afirmado Revilla.

Asimismo, ha expresado su "confianza" en la gestión del presidente del Gobierno (aunque ha dicho que "al parecer ahora confía muy poca gente"), porque lo que le ha prometido hasta ahora siempre lo ha cumplido.

Ha dicho que no estaba "contento ni enfadado", pero que le gustaría haber concluido la reunión con "algo más claro".

La primera piedra

La "buena solución", para Revilla, sería que se ponga la primera piedra en el mes de septiembre como estaba previsto, que se reanuden las obras y que el trazado sea "el de toda la vida".

Sobre la posibilidad de la ruptura del pacto de gobierno en Cantabria, Revilla ha mostrado su disposición a esperar hasta el 20 de julio.

La exigencia cántabra es "absolutamente lógica" porque -ha explicado- en esta comunidad "nunca" se han planteado problemas de insolidaridad en situaciones de crisis porque no son unos "pedigüeños".

La reunión entre ambos no había sido anunciada públicamente por petición expresa de Rodríguez Zapatero, según ha afirmado Revilla, quien ha añadido que las declaraciones sobre su contenido "estaban pactadas".

Revilla, quien como es habitual ya en él ha acudido al Palacio de la Moncloa en taxi, se ha sorprendido por la presencia de periodistas a la salida de su reunión con Zapatero porque ha asegurado que ni siquiera su mujer sabía que estaba allí.

Plan de ajuste

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció  que las inversiones públicas estatales se reducirán en  6.045 millones de euros entre 2010 y 2011, en el marco del plan  de ajuste presentado, y que la reducción afectará fundamentalmente a  las obras públicas impulsadas desde el Ministerio de Fomento.

No se ha dado detalles por parte del Gobierno de las obras que se  verán afectadas por esta medida aunque en los pasillos del Congreso, el  ministro de Fomento, José Blanco, comentó que los recortes supondrán un  retraso en las obras acordadas de un máximo de un año y una media de  seis meses, señalando que las infraestructuras más avanzadas, como la  línea de AVE Madrid-Valencia, no tendrán demoras.