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Sin rastro de los cuatro españoles desaparecidos al intentar cruzar un río en México

  • Las lluvias están remitiendo por lo que se facilitará la búsqueda
  • Colaboran aproximadamente cien personas

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Siguen las labores para encontrar a los 4 españoles desaparecidos en México

Las autoridades mexicanas no tienen rastro de los cuatro españoles desaparecidos tras volcar la embarcación en la que navegaban por un ríocerrado al turismo por fuertes lluvias, pero las condiciones meteorológicas en la zona han empezado a mejorar, según ha informado este viernes Gerardo Cabrera, quien lidera la búsqueda.

Aproximadamente cien personas, entre funcionarios, socorristas, lugareños y guías expertos, concentran sus esfuerzos en los municipios de Aquismón, Valles y Tamuín, por donde cruza el río Tanchachín y en el que se accidentaron seis españoles (cinco catalanes y una mallorquina), dos de los cuales salieron ilesos.

La búsqueda se ampliará

La lluvia que afecta a la zona amainó esta tarde, lo que ha permitido a las brigadas de socorro intensificar la búsqueda y sobrevolar el área en un helicóptero, según ha informado a la agencia EFE Cabrera, director de Protección Civil de San Luis Potosí.

Roberto Chaves, director de Protección Civil de Ciudad Madero, en el vecino estado de Tamaulipas, ha declarado este viernes que se prevén extender las labores de rastreo aguas abajo hasta el municipio de Panuco, en el estado de Veracruz, donde discurre el río del mismo nombre que desemboca en el Golfo de México.

En declaraciones a la prensa, ha explicado que las crecidas de los ríos podrían haber arrastrado a los jóvenes bastante más abajo de donde los están buscando actualmente.

Los desaparecidos subieron el miércoles a una lancha de madera con un guía y un barquero para cruzar ese afluente del estado de San Luis Potosí, en el centro de México, y visitar la famosa cascada de Tamul, pero su embarcación volcó en medio de las aguas turbulentas.

El accidente ocurrió a unos 450 kilómetros de distancia al norte de Ciudad de México, capital del país.

Cabrera ha declarado este viernes que la Protección Civil del estado "giró instrucciones diarias desde la semana pasada, mucho antes de que empezaran los temporales, para que los municipios (y las empresas) que se dedican a ofrecer servicios turísticos en los ríos de la zona Huasteca tomaran precauciones" y no llevaran turistas "por la peligrosidad que esto representa".

Los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) apuntan a que durante la jornada de hoy cederán las lluvias en el área y mañana sábado probablemente haya mejor clima.

Las actividades turísticas estaban prohíbidas

Javier Mendoza, director operativo de Huasteca Secreta, ha reiterado que desde hace varios días están prohibidas las actividades turísticas en esa zona, y ha lamentado que los desaparecidos hubieran ignorado la prohibición de navegar por el río y decidieran contratar los servicios de algún lugareño "inexperto".

Por ello, ha explicado que las empresas certificadas del área, cuando se permite navegar,  dan a sus clientes guías entrenados en primeros auxilios y navegación, cascos, chalecos salvavidas, y un breve curso introductorio para viajar en botes inflables por el río, lo que nunca se hace en embarcaciones "rústicas" de madera, como en la que se registró el accidente.

Los desaparecidos han sido identificados como Francesc Espasa Nolet, originario de Lleida; y las hermanas Nuria y Neus Terradas Trías e Irene Carbó Xifre, naturales de la población Cassà de la Selva en Girona.

Neus Terradas es becaria en la universidad mexicana de Tampico, y su hermana Nuria y su amiga Irene habían decidido visitarla.

En la barca viajaban, además, la mallorquina Aina Frau Pascual y su compañero catalán Bernat Nolet Tomas, quienes lograron nadar hasta la orilla y ponerse a salvo, y ahora colaboran en la búsqueda de sus amigos.

También sobrevivieron el guía y el barquero, los cuales fueron detenidos "inmediatamente" por las autoridades.

Francesc Espasa, estudiante de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), había viajado a México para participar en un proyecto social en aldeas apartadas, y tras finalizar el trabajo había decidido hacer turismo con Aina Frau Pascual y Bernat Palau, compañeros de la misma escuela.

Frau dijo a su padre por teléfono que el barquero y el guía, en cuanto vieron el río crecido, se echaron al agua y dejaron la balsa sin rumbo y a los seis chicos solos, agregó.