Apple extiende con Ping sus tentáculos a las redes sociales
- La estrategia de Apple cada vez cubre más áreas
- La nueva red social guarda un gran parecido con Facebook
- Hay quien cree que es el último clavo en el ataúd de MySpace
Mientras Steve Jobs se preparaba entre bastidores en el Centro Yerba Buena de San Francisco, antes de realizar su más reciente presentación, en España muchos seguíamos el esperado evento a través de una conexión de Internet. El cielo se oscurecía en Madrid al llegar una tormenta de verano: electricidad en el ambiente presagiando novedades interesantes, brillantes rayos y algún que otro estruendoso trueno al estilo "película de Frankenstein". Un casual paralelismo con el espectáculo que se avecinaba: el crecimiento una vez más de ese peculiar monstruo llamado Apple, a manos de su creador. Esa vez el suspense se resolvió en forma de nuevos productos para el mundo de la música y la televisión ... y alguna que otra sorpresa inesperada.
Y es que los tentáculos de Apple no parecen tener fin ni mesura. Del mismo modo en que tranquilamente prosigue su expansión en terrenos que ya le son propicios, como el de los teléfonos móviles y los reproductores musicales (más de 125 millones de dispositivos con iOS hay por todo el planeta) ataca a otros sigilosamente, como el de las redes sociales.
El desembarco de Apple las redes sociales
Las redes sociales un terreno inexplorado por Apple al que ahora parece que tampoco quiere renunciar. El nuevo iTunes 10, la aplicación que empezó como sencillo reproductor musical, ha evolucionado sobremanera. Aparte de servir como escaparate para la tienda y reproducir también vídeos ahora incluirá Ping, que es el nombre de la nueva "red social musical" de Apple.
Los usuarios pueden crear conexiones en Ping con sus amigos, "seguirlos" y "ser seguidos", compartir lo que están escuchando, publicar fotos y música y obtener recomendaciones de aquellos a quien siguen. Apple entra de este modo casi de lleno en territorio de Facebook, Twitter, MySpace y otras redes sociales, aunque de momento sólo tocando el palo de la música. "Uy, ¡cómo se parece esto a Facebook!" era un comentario en los corrillos durante la presentación.
“¿Tardará mucho Ping en invadir otras zonas sociales de la Red?“
Pero, ¿tardará mucho Ping en invadir otras zonas sociales de la Red? No parece probable que Apple deje escapar ese suculento barril de usuarios ávidos de comunicarse y consumir nuevos contenidos, a los que puede pescar casi sin cebo.
Si bien Facebook y Twitter se antojan gigantescos rivales incluso para Apple (aunque bien podría llegar a comprar Twitter con el dinero que tiene en caja), es probable que rivales más pequeños corran peor suerte.
Hay quien cree que Ping puede ser el clavo que faltaba en el ataúd de MySpace, un servicio que principalmente usan los jóvenes para promocionar su música y disfrutar de la que comparten mientras la escuchan.
Una vez que Apple compruebe si Ping tiene éxito y lo refine dentro de algunos meses estará listo para presentar casi cualquier batalla, y Facebook puede estar en su punto de mira. Todo estará al alcance de Ping, y si un día deciden convencer a los jóvenes quinceañeros -grandes consumidores de música también- para que compartan las fotos de sus fiestas y botellones mejor será que en redes sociales como Tuenti vayan preparando la artillería pesada.
Una gama de electrónica de consumo completamente renovada
Las novedades presentadas por Jobs incluyeron también las habituales actualizaciones de software, en forma de un esperado iOS 4.1 para iPhone, iPod e iPad que básicamente corrige bugs y mejora algunas carencias, como la exasperante lentitud del iOS 4 en los viejos iPhone 3G. Apple articula cual entrenada danza el lanzamiento de estos parches haciendo que corregir problemas de origen parezca un avance digno de merecer una gran numeración de versión.
En cambio quienes quieran disfrutar de otras mejoras verdaderamente importantes, como la esperada multitarea o imprimir desde un iPad, tendrán que esperar a noviembre que es cuando estará listo para descarga la versión 4.2 de su iOS.
En el área de la música toda la gama de iPods ha sido renovada completamente: Jobs confirmó que llevan más de 275 millones de estos aparatitos vendidos desde que el primero de ellos viera la luz hace ahora casi diez años. Todos son ahora más pequeños, más ligeros y con más capacidad, como cabría de esperar.
La evolución de la electrónica en este tipo de gadgets sigue avanzando imparable: algunos como el iPod Shuffle no tienen siquiera pantalla y pesan unos pocos gramos; se pueden comprar por 49 euros.
El nuevo iPod Nano hace que el reloj de Dick Tracy parezca un ridículo juguete de niños: pantalla táctil, iconos de colores que giran, una auténtica delicia visual de gadget.
Otros como el iPod Touch son tan versátiles que los llaman cariñosamente "iPhones sin teléfono" y por unos 230 euros ahora sirven incluso para hacer videoconferencia en pantalla de alta definición gracias a la segunda cámara frontal que incorpora.
A por los alquileres en televisión, toma dos
El otro terreno en que Apple ha querido apostar para hacerse un hueco es el del alquiler de series y películas, algo que puede resultarle más fácil al contar con una enorme base de datos de clientes de pago y muy activos.
Millones de personas almacenan cómodamente sus tarjetas de crédito en la tienda electrónica iTunes Store, listos para consumir por impulso a golpe de clic. Y millones también usan su software musical, de modo que si se le añaden nuevas funciones no tiene por qué ser difícil sacarle partido de nuevas e imaginativas formas.
Aquí es donde entra en juego el renovado Apple TV, una "caja lista" para colocar junto a la "caja tonta" que todos tenemos en casa. A diferencia del modelo anterior, que resultó poco exitoso, el nuevo tiene un precio razonable (unos 100 euros) y es tan fácil de usar que es el dispositivo que probablemente muchos hijos tecnófilos regalarían a sus madres.
Sirve para ver películas y series de televisión a través de Internet (YouTubes y fotos aparte) y ni siquiera tiene disco duro: emplea la conexión de banda ancha que haya en casa.
“Apple ha dado un gran giro al cambiar del modelo de venta de películas y series al de alquiler“
Apple ha dado un giro importante al cambiar del modelo de venta de películas y series al de alquiler: ahora los episodios de series televisivas se pueden alquilar por un dólar y las películas por unos cinco. Puede ser el fin de Blockbuster, algo ya anticipado por el éxito de Netflix (ahora socio de Apple). Y desde luego hoy no ha sido un día alegre para los fabricantes de equipos multimedia para televisiones como TiVO ni para redes sociales recomendadoras de música como Last.fm.
Con películas de Hollywood para un público consumidor masivo, el Apple tV puede tener su oportunidad en Estados Unidos. Pero Europa será otra guerra, porque aquí el precio será más alto (unos 120 euros en Alemania) y se venderá sin acceso a las películas de Netflix, por lo que su atractivo será indudablemente menor.
En Estados Unidos es tan barato que hay quien cree que incluso a Apple le saldría más rentable regalarlo: si el consumo de series y películas es tan alto como esperan, los usuarios prácticamente podrían subsidiar la cajita en cuestión con sus alquileres, como sucede con los teléfonos móviles o los routers del ADSL.
Un gigante contra el resto del mundo
Si hasta ahora a Apple le podría faltar algún nido de avispas por agitar parece que con estas novedades ha completado casi todas las provocaciones: compite en hardware con sus PCs y portátiles, contra los netbooks con el iPad, contra los fabricantes de teléfonos con el iPhone y ahora va a por las redes sociales y el alquiler de ocio televisivo .
Con sus milmillonarias ventas de canciones (unos 12.000 millones, para ser precisos, ahí es nada) es un monstruo de la industria de la música; con sus 100 millones de películas y 450 millones de episodios de series vendidas también del campo cine y la televisión. Y esto eran dos tipos que crearon un ordenador en un garaje. ¿Hasta dónde puede llegar? ¿Hasta dónde les dejarán llegar?
El moderno Prometeo que está recreando Steve Jobs tiene cada vez más miembros y piezas relevantes capaces de crujir a sus competidores sin piedad. El mercado y el tiempo demostrarán si fue buena idea abarcar tanto en tan poco tiempo. Pero en la jungla de la electrónica de consumo, de los medios y el entretenimiento y de Internet hacer muchas cosas y hacerlas rápido y tiene jugosos premios: a veces te quedas con la tarta para siempre.