La prima que pagan Portugal e Irlanda por su deuda alcanza máximos históricos
- Los mercados temen las dificultades de ambos países para reducir sus déficits
- Irlanda paga una rentabilidad superior en 419 puntos a la de Alemania
- Los bonos a 10 años portugueses ofrecen 402 puntos más que los germanos
Rebrotan en los mercados financieros las tensiones sobre la deuda pública de varios países de la Unión Europea (UE). Este lunes, la prima de riesgo ofrecida a los inversores por comprar la deuda soberana de Portugal e Irlanda ha marcado su nivel más alto desde la entrada en vigor del euro respecto al bund alemán, que sirve de referencia en Europa.
En concreto, los bonos a 10 años portugueses pagan este lunes 375,8 puntos básicos más que los germanos y los irlandeses, 387 puntos más, debido a la preocupación de los mercados a que ambos países tengan dificultades para financiar sus elevados déficits presupuestarios.
La rentabilidad ofrecidas por la compra de obligaciones lusas en los mercados secundarios ha alcanzado un 6,47%, frente al 2,467% que se ofrece por el bono alemán a 10 años. Finalmente ha cerrado en 6,225%.
Por su parte, la rentabilidad de los bonos irlandeses a 10 años ha marcado un nuevo máximo al subir hasta un 6,64%, aunque al cierre se ha quedado en 6,337%.
A diferencia de estos dos países, la prima de riesgo ofrecida a los inversores que compran el bono español a 10 años ha cerrado este lunes en 173,6 puntos básicos respecto al ofrecido por la deuda alemana, por debajo de la cifra con la que cerró el pasado viernes. Así, la rentabilidad ofrecida por la deuda española se queda en 4,203%.
El efecto de estas tensiones sobre los bonos españoles se puede comprobar este martes, cuando se celebra una subasta de letras del Tesoro español a doce y dieciocho meses.
Rumores sobre la solvencia de Irlanda
El Banco Central Europeo (BCE) intervino el pasado viernes para tratar de estabilizar el mercado de bonos irlandeses, después de que un informe del banco británico Barclays extendiera entre los inversores el temor a que el país pudiera necesitar acudir al fondo de rescate creado por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Aunque los analistas aseguran que Dublín sólo necesitaría esa ayuda financiera en el caso de que hubiera nuevas pérdidas bancarias combinadas con una recaída de su economía, los rumores sobre la solvencia de Irlanda ponen en evidencia la fragilidad de la deuda soberana europea en los mercados.
El Gobierno irlandés podrá comprobar el sentimiento de los inversores respecto a su deuda este martes, cuando realice una subasta de bonos a 8 y 4 años para captar financiación en los mercados. Los expertos aseguran que Dublín podría verse obligado a pagar elevados intereses para poder colocar su emisión de deuda.
Desconfianza por el déficit de Portugal
Los analistas del mercado atribuyen la subida de la prima de Portugal a una persistente desconfianza internacional por la crisis económica y el elevado déficit presupuestario del país, que cerró 2009 en el 9,4%.
Tanto Bruselas como los organismos crediticios internacionales han considerado fundamental, en diversos informes, que Lisboa sanee sus presupuestos para evitar un contagio de la crisis griega.
En ese sentido, el ministro de Economía de Portugal, José Antonio Viera da Silva, ha garantizado este lunes que existe "un total compromiso" del Gobierno del primer ministro, José Sócrates, con las metas de consolidación presupuestaria.
Grecia postpone los nuevos test de estrés a su banca
También ha influído en los mercados, una información del diario económico británico Financial Times, que asegura este lunes que el FMI, la Comisión Europea y el BCE han acordado con el banco central griego retrasar hasta finales de octubre la realización de las pruebas de solvencia de la banca helena.
El Banco de Grecia ha confirmado ese retraso de las pruebas de resistencia a la instituciones bancarias del país, pero ha asegurado que esta decisión -acordada con el FMI y la UE- no tiene nada que ver con la intención del Gobierno de Atenas de potenciar las fusiones de varias entidades.
En un comunicado emitido este lunes, el banco emisor heleno ha indicado que los test previstos para este mes se efectuarán "dentro del año en curso" y ha explicado que este retraso fue sugerido por los tres organismos que supervisan la marcha de la economía griega, la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
"El motivo del aplazamiento es el hecho de que una prueba muy próxima a los resultados de la anterior, que se realizó en la Unión Europea (UE), no ofrecerá posiblemente nueva información", argumenta el Banco de Grecia en su nota.
El supervisor bancario también recuerda que los test de estrés difundidos en julio por el Comité Europeo de Supervisores Bancarios "confirmó la solvencia de la banca griega" y que "es bastante posible" que se repita esa conclusión.