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Marcelino Camacho, el histórico líder de CC.OO., ingresado en estado grave

  • El fundador del sindicato e histórico militante antifranquista padece Alzheimer
  • Nació en Soria hace 92 años, estuvo 14 años preso y llegó a ser diputado

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El histórico dirigente y fundador de Comisiones Obreras Marcelino Camacho se encuentra en estado grave, ingresado en un hospital madrileño, según ha informado esta noche el sindicato.

Camacho, que tiene 92 años y padece desde hace varios el mal de Alzheimer, ha sufrido un gran deterioro de su salud. Según la agencia Colpisa, que cita fuentes cercanas a su familia, fue ingresado hace unos días en un centro en Majadahonda (Madrid).

En cambio, el secretario confederal de Comunicación del sindicato, Fernando Lezcano, ha informado a Efe de que el ingreso ha tenido lugar este mismo martes por la noche.

Colpisa añade que Camacho está rodeado de su mujer, Josefina Samper, y sus hijos que temen el fatal desenlace en cualquier momento. Tan es así que incluso la formación política catalana EUiA llegó a lamentar su fallecimiento en una nota de prensa por la que luego pidió disculpas.

Nació en el pueblo soriano de La Rasa en 1918 pero ha pasado la mayor parte de su vida en Madrid, donde fue encarcelado nada más acabar la guerra civil. Pasó por el exilio y regresó a España en 1957 para trabajar como fresador.

Lucha obrera en el franquismo

Pronto fue elegido miembro de la Comisión Obrera Provincial del Metal, la primera que se creó en Madrid y que sería el germen del sindicato clandestino.

Acusado como dirigente del mismo en el llamado Proceso 1.001, fue condenado a 20 años de prisión, aunque a finales de 1975 se benefició de la amnistía general por la proclamación del rey Juan Carlos.

Fue el primer secretario general de CC.OO. entre 1976 y 1987 y diputado por el Partido Comunista entre 1977 y 1981.

Célebre por su inseparable jersey de cuello vuelto, en los últimos años ha seguido participando en diversos actos reivindicativos, desde los derechos de los trabajadores hasta la memoria histórica.

En el 2008 protestó por el derribo de la cárcel de Carabanchel, símbolo de la represión del franquismo, donde pasó buena parte de los 14 años en los que estuvo preso durante el franquismo.