La revolución de Twitter en algunos números

• Además del charloteo más inane, ofrece cantidades ingentes de información
• 1.000 millones de tuits a la semana así lo aseguran
• Su uso desde dispositivos móviles crece también desproporcionadamente

Twitter cumple cinco años

Este lunes se cumplen cinco años desde que Jack Dorsey enviara el primer mensaje a través de Twitter, uno en el que simplemente decía "configurando mi twttr".

Como en el caso de muchos otros servicios que luego se hicieron enormemente, nadie podía prever entonces el éxito que iba a tener Twitter ni la forma en la que los usuarios lo iban a cambiar.

Porque lo cierto es que desde entonces, salvo el límite de 140 caracteres en los mensajes, hay pocas cosas que no hayan cambiado, incluido el nombre del servicio, que fue de las primeras cosas en cambiar.

Convenciones como la de usar el nombre de un usuario precedido de una arroba (@) para indicar tuits dirigidos a este o para indicar respuestas a otros suyos fueron ideas de los usuarios que luego adoptó de forma oficial Twitter.

Lo mismo sucedió con la idea de utilizar la almohadilla (#) seguida de una palabra o código convenido para agrupar tuits de un mismo tema mediante. Son lo que se llaman hashtags, y son equivalentes a escribir una palabra clave en un tuit.

De todos modos, el cambio más radical ocurrió cuando en noviembre de 2009 la pregunta de "qué estás haciendo" que encabezaba el servicio pasó a ser "qué está pasando", marcando la aceptación por los creadores del servicio de que este se había convertido en una forma increíble de tomarle el pulso al mundo.

Cifras espectaculares

Por cierto, que en noviembre de 2009 fue también cuando salió la versión de Twitter en español. Y aunque sigue siendo complicado explicar qué es Twitter incluso a usuarios de Internet que no lo utilizan, por no hablar de la complicación de hacerlo a quien no usa Internet, sus cifras de crecimiento son espectaculares.

Según unas cifras publicadas recientemente en el blog de la compañía, si se tardaron 3 años, 2 meses y 1 día en alcanzar el tuit 1.000 millones, ese es el número de tuits que los usuarios envían ahora cada semana.

Visto de otro modo, si hace un año se enviaban 50 millones de tuits cada semana, ahora son 140 millones, con el récord de 6.939 tuits por segundo alcanzado cuatros segundos después de la medianoche del día de año nuevo en Japón.

Lógicamente, nadie es capaz de seguir ni de lejos toda la información que circula por Twitter, ni aún descontando el 40% de charloteo inútil que en agosto de 2009 estimaba Pear Analytics que contenían los tuits en inglés, así que es importante saber a qué usuarios seguir para poderle sacar jugo.

Claro que es más fácil decirlo que hacerlo, ya que sin ir más lejos en febrero de 2011 se creaban una media de 460.000 cuentas nuevas cada día para un total estimado de unos 190 millones de usuarios.

Una estrategia sencilla para empezar es, aparte de las propias recomendaciones de Twitter, ver a quién siguen aquellas personas que conocemos en el mundo real o cuyos blogs seguimos.

Pero en cualquier caso, igual que muchos otros servicios de Internet, Twitter será tan útil, divertido, o inútil, como queramos hacerlo. Todo este crecimiento ha hecho además que el número de empleados en Twitter haya ido creciendo desde los 8 de enero de 2008 a los 400 actuales.

Entre otras cosas han tenido que pelear con las sobrecargas del sistema que durante un par de años hicieron extremadamente popular la fail whale, la ballena azul llevada al vuelo por unos pájaros que salía con excesiva frecuencia durante ese tiempo.

Aires renovados

En el futuro, es complicado saber por dónde irán los tiros, pero es cierto que hace tiempo que no salía un servicio tan fresco, en el que se pueda interactuar con usuarios de todo tipo, desde los más de a pie hasta astronautas que están a bordo de la Estación Espacial Internacional.

El que se pueda usar con mucha facilidad desde dispositivos móviles, y el número de usuarios que así lo hacen ha crecido en un 182 % desde el año pasado, le da además una ubicuidad que otros servicios no tienen.

Con todo esto Twitter es, desde luego, una forma única de tomarle el pulso al mundo, y creo que ahora que nos estamos acostumbrando a disponer de ella, ya no querremos dejar de usarla. Otra cosa será que sus responsables consigan establecer un modelo de negocio válido para su supervivencia.