'David' Gómez contra 'Goliat' Aguirre en Madrid
- Aguirre revalidará la mayoría absoluta con 75 diputados, según el CIS
- PSOE y IU pactarían para gobernar si Aguirre no saca mayoría absoluta
- El partido de Rosa Díez podría irrumpir en la Asamblea de Madrid
Ver también: Candidatos a la presidencia de Madrid
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La Comunidad de Madrid es uno de los grandes bastiones del PP en toda España. Desde 1995 el PSOE no levanta cabeza y parece haberse instalado definitivamente en la silla de la oposición.
El candidato del PSM, Tomás Gómez, busca el difícil cambio: el desembarco de los socialistas en la Puerta del Sol. Quiere ganar la batalla a la candidata del PP, Esperanza Aguirre, empresa en este momento más que difícil a juzgar por las encuestas que dan más de 20 puntos de diferencia entre ambos partidos, situando al PP a la cabeza.
El último socialista en gobernar Madrid fue Joaquín Leguina y de eso hace ya mucho. Rafael Simancas rozó la gloria en 2003 cuando tuvo la oportunidad de unirse a IU para desalojar al PP del Ejecutivo madrileño. Pero solo la rozó. El famoso 'tamayazo' (la deserción de los diputados socialistas Tamayo y Sáez en la votación) le hizo despertar del sueño. Se repitieron las elecciones autonómicas y Aguirre arrasó.
Aguirre sigue mandando
Los sondeos son unánimes. Aguirre, a la cabeza de la Comunidad de Madrid y del PP regional, seguirá arrasando. Según la última encuesta del CIS, de los 129 escaños, 75 serán para el PP, 41 para el PSOE y 13 para IU.
El PP obtendría 10 más de los necesarios para la mayoría absoluta y 8 más de los que tiene ahora por un aumento de la población. La actual presidenta madrileña no tendrá ningún problema, según apuntan los sondeos, para revalidar las mayorías absolutas de 2003 y 2007.
Un sondeo de Sigma Dos para El Mundo, publicado en abril, pone de manifiesto que el PP arrasará el 22 de mayo abriendo una brecha con el PSOE de 26,3 puntos en estimación de voto. Superaría así la mayoría absoluta de 2007 cuando Esperanza Aguirre obtuvo el 53,5% de los votos y 67 de los 120 diputados.
Según otra encuesta de Metroscopia para El País, Aguirre obtendrá el 53,4% de los votos, mientras que el PSM no alcanzará ni un tercio de los sufragios (29,1%).
Según las dos encuestas, el PSM perdería votos que recogería IU, con Gregorio Gordo como cabeza de lista, y la sorpresa la puede dar el partido de Rosa Diéz, UPyD, con la entrada al hemiciclo de la Asamblea de Madrid, aunque aquí las encuestas no se ponen de acuerdo. Luis de Velasco es el candidato de UPyD.
Más que difícil tarea para Tomás Gómez
Ante este panorama Tomás Gómez lo tiene difícil pero a nadie más que a él le gustan los retos complicados. Los datos ponen de manifiesto que arrasa en todas las elecciones a las que se presenta. Arrasó en Parla (Madrid) convirtiéndose en el alcalde más votado de España, por dos veces.
Arrasó cuando compitió en primarias para ser el candidato a alcalde de ese municipio; arrasó cuando, tras la marcha de Simancas, se dispuso a liderar un convulso PSM; y, en su batalla más reciente, echó un pulso a Ferraz provocando unas primarias en el socialismo madrileño.
Resultado: se llevó por delante a Zapatero, Rubalcaba y Blanco ganando a Trinidad Jiménez, la preferida por el presidente para disputar la presidencia a Aguirre. Consolidaba así su posición como rebelde del PSOE. Los tres pesos pesados socialistas apoyaron claramente a la ministra. Zapatero la eligió, Rubalcaba dijo que el único activo de Gómez había sido decir no a Zapatero y Blanco se posicionó a su lado.
El presidente del Gobierno trató de convencerlo para que dejara el camino libre a la ministra, le habló de encuestas desfavorables pero él no hizo caso. Parece no tener en cuenta ahora de los sondeos que le dicen que se sentará en la bancada de la oposición en Vallecas, sede de la Asamblea de Madrid.
Convierte la adversidad en oportunidad y las primarias le han servido para hacerse famoso de la noche a la mañana. Algo más que necesario para tratar de tutear a una mediática Esperanza Aguirre.
Todos unidos para que caiga Esperanza
Aguirre sabe como nadie captar la atención de los medios y su entorno la define como sincera, testaruda, perfeccionista y controladora. Consiguió sacudirse el caso Gürtel, liquidando a los consejeros imputados, y ha echado balones fuera con el caso de los espías en Madrid, reabierto ahora por la Audiencia Provincial.
Su discurso no se circunscribe a la política regional y es habitual ver cómo hace oposición al propio Zapatero.
En estas elecciones autonómicas, la izquierda lucha por desbancar a Aguirre y no descartan el pacto como única forma de hacerle frente.
El propio Tomás Gómez ya ha dicho que si hay mayoría de izquierdas pactaría con IU, tal y como ya hizo cuando era alcalde de Parla. El candidato de IU, Gregorio Gordo, recoge el guante y deja claro que si depende de su formación, está garantizado que Aguirre no seguirá en el Gobierno.
Luis de Velasco, cabeza de lista por UPyD, no se quiere quedar atrás y ante la posibilidad de obtener varios diputados señala que podrían ser definitivos en la conformación del nuevo Gobierno.
Paro, copago sanitario y privatizaciones en el debate electoral
En la precampaña Aguirre ha lanzado por igual dardos al candidato socialista de Madrid y al presidente del Gobierno a quien culpa del paro. Ve la convocatoria de elecciones generales anticipadas como la única forma de salir de la crisis.
El paro en Madrid se sitúa en el 15,75%, cuatro puntos por debajo de la media nacional (20,33%), según la última Encuesta de Población Activa (EPA).
Tomás Gómez ya ha revelado los cuatro ejes de su programa electoral: educación, sanidad, empleo y transporte, que plantea como principales problemas de la región. Tanto PSOE como IU centran sus críticas a Aguirre en las políticas que le achacan de corte neoliberal y proponen como alternativa una mayor apuesta por lo público.
Acusan a la presidenta de acometer políticas de privatización de servicios básicos y se oponen a la privatización del Canal de Isabel II. Gómez le acusa de querer imponer el copago sanitario, algo que ella misma niega.
Aguirre, durante la precampaña, se ha guardado sus propuestas electorales. Sabedora de la ventaja en las encuestas controla los tiempos y no muestra prisa. A pesar de su presencia constante en los medios, está midiendo sus apariciones.
Gómez quiere estar más en la palestra y utiliza recursos impactantes, como colgar el cartel de 'Invictus' colgado de la sede del PSM en la plaza de Callao, para captar la atención de los medios.
Parece que la suya tendrá que ser una proeza de caballero medieval y si quiere apear a Aguirre de la Puerta del Sol tendrá que hacer frente a una batalla más que difícil.