Amanece en Lorca con menos miedo y con ganas de recobrar la normalidad
- Algunos lorquinos vuelven este viernes a sus puestos de trabajo
- Los peritos de las aseguradoras empezarán a visitar los inmuebles
- Sigue al minuto toda la información relacionada con el terremoto
- A partir de las 11:00 en directo, el funeral por la vícitmas mortales
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Amanece en los cinco campamentos, después de pasar una noche más tranquila de lo esperado. Ya lo anticipaba el Delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, al filo de la medianoche "Esta noche no es igual que la de ayer". Y es que la madrugada del jueves fue enormemente tensa tras las dos sacudidas de la tierra, que causaron nueve víctimas mortales, y más de 300 heridos.
Según la delegación del Gobierno entre cuatro mil y cinco mil personas han pasado lo noche en los cinco campamentos. Cruz Roja y la Unidad MIlitar de Emergencias habían repartido pequeños kits de alimentos: ensaladilla, cacahuetes, mermeleda, galletas, eran parte del menú.
En el campamento de Santa Quiteria la policía patrullaba entre las calles de la ciudad de lonas y barras de hierro, que en apenas unas horas, habían levantado entre el ejército y Cruz Roja. Entraba la noche y el silencio era la tónica. Las tiendas repletas y ya cerradas. Todavía algunos durmieron al raso, entre ellos no pocos niños.Se acomodaban en las sillas de plástico o bien dormían en el suelo cubiertos con las mantas de las asistencias o las que rescataban de sus casas. Casi todos son inmigrantes.
Pero además de esas cinco mil personas, muchos otras habían abandonado la ciudad hacia sus casas fuera de Lorca o buscando la solidaridad de amigos y familia. No era extraño ver a otros durmiendo en sus coches. Algunos frente a sus casas y comercios, por temor a que puedieran ser robados. No se ha conocido ningún caso. Como dijo el alcalde de Lorca, Francisco Jódar, "el pueblo es un ejemplo de civismo".
Vuelta al trabajo y a recuperar documentos para el seguro
Con las primeras luces del día, muchos han partido para sus trabajos, sobre todo, los que trabajan en el campo, que entre los inmigrantes son mayoría. Otros vuelven a sus casas, para esperar a los técnicos que tienen que evaluar el estado de sus edificios. Este jueves se visitaron medio millar de viviendas, la mitad de ellas se vieron inhabitables. En las que sí se podía entrar, prácticamente nadie pasó la noche.
Ahora vuelven para ir adecentando la vivienda, para que vaya recobrando la humanidad. Incluso en las menos dañadas, todo se ha descolocado como la vida en Lorca.
Otros, los que han tenido menos fortuna, quieren entrar a recuperar recuerdos y documentos. Desde este jueves se sabe que hay oficinas en las que se recogen los datos para cobrar las indemnizaciones a las aseguradoras. Les han pedido que lo reclamen cuantos antes, porque en esta semana se espera que ya empiecen a acercarse los peritos.
El Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), el organismo público que se encarga de pagar las indemnizaciones en casos de catástrofes, calcula que el terremoto podría haber casados daños por más de 36 millones de euros.
El CCS ha desplazado ya un equipo de cuatro peritos a la zona para reconocer los edificios, aunque más de 40 expertos podrían viajar en los próximos días hasta la localidad murciana para empezar a tramitar los expedientes.