Sarkozy y Merkel manifiestan su satisfacción por las medidas adoptadas por Italia y España
- Las consideran esenciales "para restaurar la confianza de los mercados"
- Ambos mandatarios han conversado por teléfono sobre la crisis de la deuda
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, han mostrado este domingo en un comunicado oficial su satisfacción por las medidas adoptadas por Italia y España en el ámbito de las finanzas públicas y en el de la competitividad.
Ambos mandatarios consideran que la aplicación "rápida y completa" de las medidas es "esencial para restaurar la confianza de los mercados", explica el comunicado, difundido por el palacio del Elíseo.
"En particular, el objetivo de las autoridades italianas de lograr el equilibrio presupuestario con un año de antelación es de una importancia fundamental. Una aplicación rápida y completa de las medidas anunciadas es esencial para restablecer la confianza de los mercados", continúa el texto.
Apoyan el segundo rescate a Grecia
En el comunicado Merkel y Sarkozy reiteran además su voluntad de aplicar "plenamente" el segundo rescate para Grecia pactado el pasado 21 de julio y que incluye préstamos por 109.000 millones de euros, parte de ellos financiados por la banca privada.
En particular, Francia y Alemania destacan la importancia de que las autoridades legislativas ratifiquen "rápidamente" estas medidas, "antes de que termine el mes de septiembre".
"Tal como se decidió el 21 de julio, la eficacia del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) será mejorada con una mayor flexibilidad conforme a las condiciones adecuadas", continúa el texto.
En concreto, se refiere a una serie de instrumentos: "programa de previsión, financiación de la recapitalización de las instituciones financieras e intervención en el mercado secundario en base a un análisis del BCE de la existencia de una situación excepcional en los mercados financieros que suponga un riesgo para la estabilidad financiera y sobre la base de una decisión tomada de común acuerdo por los Estados participantes a fin de evitar el contagio".
"En línea con las decisiones del 21 de julio, Francia y Alemania confían en que el análisis del BCE será la base apropiada de las intervenciones en el mercado secundario en la medida que contribuirá a determinar si existe un riesgo para la estabilidad financiera en la eurozona en su conjunto", concluye el comunicado.