Gadafi: "No nos entregaremos, no somos mujeres, seguiremos luchando"

• En un nuevo mensaje ha dicho también que "la guerra será larga y Libia arderá"
• El último primer ministro de Gadafi ha mostrado su apoyo a la "revolución libia"
• Los líderes rebeldes amplían las negociaciones con los jefes tribales
• Les habían dado hasta el sábado pero quieren evitar un baño de sangre

Gadafi: "No nos entregaremos, no somos mujeres, seguiremos luchando"

El coronel libio Muamar el Gadafi ha asegurado este jueves que no se entregará y que continuará luchando contra los rebeldes y las fuerzas de la OTAN, en un discurso que está siendo ofrecido por extractos en la televisión por satélite siria "Al Rai".

"No nos entregaremos otra vez, no somos mujeres, continuaremos luchando", ha señalado Gadafi, quien ha dicho que teme que su discurso, cuyos extractos están siendo difundidos en rótulos por el canal sirio, no pueda ser escuchado debido a que la señal del canal pueda cortarse.

También ha asegurado que la guerra de libia será "larga" y que el país "arderá". En su discurso ha añadido que "todas las tribus libias están armadas" y les ha pedido que "tiendan emboscadas a los rebeldes" para que no estén "sometidos a ellos".

Los rebeldes han calificado este llamamamiento como "desesperado y miserable" y han sentenciado que "la revolución ha ganado".

"Vuestra resistencia debe aumentar día a día"

Apenas unas horas después Muamar el Gadafi ha llamado a sus seguidores a prepararse para resistir y hacer frente a "una guerra prolongada", en un nuevo mensaje difundido por el canal de televisión sirio "Al Rai".

En la grabación Gadafi insta también a los "países agresores" (en referencia a la OTAN) a "entenderse con la legalidad".

"Vuestra resistencia debe aumentar día a día. Preparaos para una guerra de guerrillas y guerra urbana, y propagad una resistencia popular a lo largo y ancho de Libia"", dijo el ex líder libio, que permanece en paradero desconocido.

Gadafi agregó que en los últimos 42 años Libia ha vivido la "libertad y la prosperidad", pero que ahora la OTAN ha destruido la "modernas infraestructuras".

Según el dictador, las "fuerzas colonialistas" tratan de esquilmar los recursos naturales de Libia, principalmente el petróleo y las fuentes de agua.

"Desean devolver a Libia a lo que fue antes de la revolución, que todos los recursos queden en sus manos, pero preferimos la muerte antes que eso", insistió Gadafi.

El último ministro de Gadafi apoya "la revolución libia"

El último primer ministro del régimen de Muamar el Gadafi, Mahmudi el Baghdadi, ha anunciado su apoyo a la "revolución libia" y ha pedido que cese el derramamiento de sangre, en declaraciones al canal de televisión "Al Arabiya", con sede en Emiratos Árabes Unidos.

"Anuncio mi respaldo a la revolución libia. Cumpliré con los derechos del pueblo libio por el bienestar de Libia. Deseo que acabe el derramamiento de sangre y que se produzca una reconciliación inmediata", ha señalado El Baghdadi, que el pasado 22 de agosto huyó a la isla tunecina de Yerba.

Los rebeldes libios alargan el ultimátum

Los rebeldes libios han concedido una semana más a los partidarios de Gadafi y especialmente a los lideres tribales de Sirte, la localidad natal de Muamar Gadafi, para organizar una entrega pacífica de la ciudad, según ha informado el Consejo Nacional de Transición (CNT), su máximo órgano.

El CNT había fijado el pasado martes un ultimátum para todas las ciudades gadafistas que establecía que si no se rendían antes del sábado se enfrentarían a una invasión militar.

BBC Radio ha detallado que hay intensas conversaciones de los rebeldes con los líderes tribales que se han roto pero que se ha ampliado una semana más para que estos líderes, que ya están convencidos de que la situación es insostenible, hagan ver a los gadafistas de que no tienen otra opción que rendirse.

"Han suspendido el ultimátum una semana", ha declarado un portavoz de los rebeldes, Mohamed Zawawi, que ha recalcado que eso significa que hay avances en las negociaciones.

El papel de Saadi

Uno de los hijos de Gadafi, Saadi, aseguró el pasado miércoles que estaba en contacto con el CNT para ayudar en la negociación y evitar "un baño de sangre" y que tenía la bendición de su padre para hacerlo.

Sin embargo, en un mensaje de audio su hermano Saif al-Islam, conocido por ser la mano derecha de su padre, hizo un llamamiento a "una guerra de desgaste".

Fuentes del CNT han recalcado que están tratando de convencer a los leales a Gadafi de que el régimen está acabado y de que serán tratados justamente si se reinden.

Las conversaciones se producen mientras hay bombardeos de la OTAN en la ciudad y los accesos a la misma están cortados por los rebeldes, de forma que no entran víveres.

"No tenemos prisa por tomar Sirte. No tiene importancia económica y no vamos a perder vidas por ella. Podemos cortar suministros y esperar, incluso más de una semana", ha declarado Zawawi.

En la misma línea, Jalal al-Deghili, ministro del CNT ha declarado desde el frente de Nofilia, a apenas un centenar de kilómetros al este de Sirte que no cree que Gadafi se encuentre allí, aunque sí es el feudo de su tribu.

"No habrá ningún ataque a Sirte por ahora. Seguimos negociando para entrar pacíficamente en la ciudad", ha agregado tras detallar que las negociaciones con los líderes tribales buscan una solución pacífica.

"Los líderes tribales están de acuerdo con nosotros que no debemos hacer la guerra en la ciudad", ha añadido el comandante rebelde Younis al-Abdal, que se ha mostrado "muy optimista", aunque "algunas unidades todavía no se quieren ir".