La Fobos-Grunt, abocada a caer a la Tierra
- Roscosmos tiene hasta principios de diciembre para intentar recuperarla
- Diseños poco probados y decisiones arriesgadas, causas de su fracaso
- Su eventual reentrada en la atmósfera no supone un riesgo especial
Ya ha pasado más de una semana desde su lanzamiento y la sonda Fobos-Grunt sigue en la órbita terrestre. La primera fase del lanzamiento se realizó sin problemas, pero la sonda lleva desde entonces en su órbita de aparcamiento cuando debería haber partido hacia Marte apenas unas horas después de despegar.
La causa inmediata de esto es que los motores de su propulsor, que debían haber elevado primero su órbita hasta unos 4.500 kilómetros de altitud y luego haberla enviado rumbo a Marte nunca se llegaron a disparar.
Lo que no está nada claro es por qué esto ha sido así, y Roscosmos no es que esté esforzándose en dar información acerca de lo que está sucediendo.
Poca información
Al principio se especuló con la posibilidad de que los sistemas de a bordo hubieran perdido la orientación a la hora de pasar de utilizar el Sol como referencia para calcular la posición de la sonda a pasar a fijarse en las estrellas.
“Parece que el origen del problema está en un fallo del ordenador de la Fobos-Grunt“
Pero por lo que se ha podido ir sabiendo parece más probable que el origen del problema esté en un fallo del ordenador de a bordo de la Fobos-Grunt, que además de los sistemas de la sonda controla el funcionamiento de la MDU, que carece de sistemas de control propios.
Conocido como BKU, se trata de un ordenador de nuevo diseño creado por NPO Lavochkin en lugar de por OKB Mars, la empresa con la que Roskosmos solía contratar este tipo de desarrollos, y lo cierto es que NPO Lavochkin carecía de experiencia en este tipo de este tipo de sistemas.
Y por si esto fuera poco, el perfil del lanzamiento requería que los dos encendidos de motor necesarios para poner la sonda en camino se realizaran en automático, pues tenían que haber sucedido fuera del alcance de las estaciones de control rusas.
Además, parece ser que el ordenador tampoco estaba programado para recibir órdenes desde tierra en las primeras etapas de la misión.
Demasiados diseños nuevos y poco probados y una serie de decisiones cuando menos dudosas a la hora de plantear el lanzamiento se han unido para dejar prácticamente condenada a un fracaso seguro la misión espacial rusa más ambiciosa de los últimos años, la misión que tenía que ir hasta Fobos y traer de vuelta unas muestras de su suelo.
Desde Roscosmos parece que todavía no están dispuestos a tirar la toalla y dicen que aún tienen hasta principios de diciembre para intentar ponerse en contacto con la sonda y reprogramar los parámetros de la misión para recuperarla y enviarla de camino a Marte.
Reentrada espectacular
Pero de no conseguirlo, lo que la verdad a estas altura parece lo más probable, esta terminará cayendo sobre la Tierra a finales de diciembre o principios de enero, dependiendo de como evolucione su órbita, aunque no debería suponer ningún peligro especial, entre otras cosas porque aún hay unas siete toneladas y media de combustible a bordo, que probablemente explotarán desmenuzando la Fobos-Grunt en pequeños trozos y causando una reentrada realmente espectacular.
“El combustible haría explotar en pedazos la sonda durante la reentrada“
Tampoco es relevante que uno de sus instrumentos incorpore cobalto 57, pues aunque este es en efecto radiactivo, sólo hay 0,05 microgramos a bordo.
Otra cosa serán las consecuencias que tenga este fracaso para la agencia espacial rusa. Y es que como se suele decir, los experimentos en casa y con gaseosa.