Vuelven los 'Ibéroes', los únicos superhéroes españoles

• Iñigo Aguirre y Javier Tartaglia dan un 'Día libre' a sus héroes
• Un cómic autoeditado que ganó el premio al autor revelación en Expocómic

Tráiler de 'Ibéroes: Día libre', de Iñigo Aguirre y Javier Tartaglia

Hace dos años un joven autor zaragozano, Iñigo Aguirre, se atrevió a plantar cara a las grandes editoriales publicando un cómic pagado de su propio bolsillo y protagonizado por un grupo de superhéroes españoles. Una auténtica locura en el actual mercado espeañol pero que fue un éxito, ya que vendió 2.100 ejemplares y consiguió el Premio al Autor Revelación en el Expocómic de Madrid de 2010. Ahora, dos años después su héroes vuelven, con su especial sentido del humor, en su segundo cómic: Iberoes, Dia libre, en el que vuelve a contar con la colaboración, en el color, de Javier Tartaglia (Un colorista que trabaja para Marvel en títulos como El capitán América).

"Esta nueva aventura sigue un esquema "clásico" de las historias de superhéroes -asegura Iñigo-, que consiste en mostrar al lector un día normal en la vida de cada uno de los miembros del equipo. Esto permite crear varias historias individuales dentro de una mayor, y los lectores pueden conocer un poco mejor a cada personaje por separado".

"Así, en este "Día Libre", podemos ver cómo Viriato y El Representante (los dos jefes del grupo) viajan a Lisboa para "enchufarle" nuevos poderes al primero. También veremos cómo Tina Gelatina y Ramón del Valle combaten contra unos villanos que dirigen la mafia de la "Ruta del Bakalao". El Abad Abraham, nuestro mago particular, viajará a un santuario de Huesca invitado por unos religiosos con superpoderes. El robot Andy Androide visitará la feria del caballo de Jerez y tendrá que vérselas con un paparazzi sevillano con superpoderes, y finalmente, los gemelos Birli&Birloque montarán guardia en el cuartel general de Madrid, si no se matan antes entre ellos".

Nuevos villanos que controlan "La ruta del bakalao"

"En esta ocasión -comenta Iñigo- hay muchísimos villanos y seres que, sin ser malvados, son algo polémicos. Tenemos a un paparazzi sevillano con aspecto de hombre lobo llamado Pedro Peludo, que puede trepar por las paredes y sacar las mejores fotos. También tenemos a un grupo de supermalvados que controlan la Ruta del Bakalao, llamados Nacional 3 (como la carretera) entre los que está Éxtasis -un robot hecho de "tripis"-, Histeria -un admirador de Tino Casal con poderes sónicos-, el Capitán Bakalao -una especie de pescado gigante vestido como el compañero de Tintín- y muchos otros".

"La primera aventura sirvió como "tarjeta de presentación" del grupo, por así decirlo. Actuaban todos en equipo, y no podíamos prestar mucha atención a cada miembro. Y yo creo que, separándolos en esta segunda ocasión, cada personaje empieza a encontrar su sitio y su propia voz. A partir de esta segunda aventura se abre el panorama y comenzamos a vislumbrar muchas oportunidades y argumentos que serán desarrollados próximamente y que harán que cada personaje crezca".

Unos personajes que hablan mucho, en comparación con los auténticos superhéroes. "La verdad es que antes no era así -confiesa Iñigo- pero es cierto que en los últimos  años el cómic americano ha ido "jibarizando" los diálogos de los  personajes y primando sobre todo el dibujo espectacular y las dobles  páginas. En este sentido, yo me he quedado en un cómic más clásico, con  bastantes diálogos y viñetas por página. Ocurre que también tengo que  contar muchas cosas y los recursos son limitados, así que cada tebeo de  Ibéroes es como un "concentrado" equivalente a una saga de 7 u 8 números  de las americanas. Antes... ¡madre, la de cosas que podían pasar en un  número de 22 páginas de Spider-Man! Pero son otros tiempos...".

"Me falta mucho que aprender"

A pesar del éxito mediático, iñigo confiesa que todavía está empezando: " Aún me falta mucho que aprender en cuanto a dibujo, pero estoy más contento con el resultado de este segundo número. Como los lectores comprobarán, me sigue gustando complicarme la vida añadiendo mil y un detalles a los paneles y a los fondos, pero no sé hacerlo de forma simple, jeje... En cualquier caso, ahora dibujo algo más rápido, y el resultado final me convence más, así que creo que voy en buena dirección... ¡espero!"

Iñigo es bastante realista en cuanto a vivir de los tebeos: "Envidio enormemente a la gente que vive de dibujar en España (no hay muchos) y no digamos ya a los que viven de dibujar a sus propias creaciones (debe de haber dos o tres). Yo no puedo planteármelo, así que lo hago por vicio, lo que tampoco es necesariamente malo, ya que puedo contar las historias que quiero, y por otro lado me gusta el trabajo con el que me gano la vida". 

"El cómic se vendió bastante bien para lo que son las cifras actuales de cómics, no tengo problema en dar números: llevamos 2.100 ejemplares en papel, entre los que se han vendido en tiendas y salones, y cerca de 100 más en digital. Un dato mejorable seguramente, pero para ser la obra de un autor novel y no basarse en parodias de ningún personaje conocido -que siempre tienen algo más de tirón- estoy muy agradecido".

Ninguna editorial se ha interesado por 'Ibéroes'

Aunque parezca increíble, a pesar del premio en Expocómic, ninguna editorial se ha interesado por publicar su trabajo: "Confieso que no he intentado mover entre las editoriales este segundo número, porque ya estoy familiarizado con todo el proceso de producción y realización del tebeo, y al final me he vuelto a liar la manta a la cabeza y lo he sacado nuevamente por mi cuenta. También es cierto que no he recibido ofertas, pero quizá "haga ronda" en el número tres, a ver si tengo suerte. No descarto intentar vender también en algún país de Latinoamérica, quizá ahí también tenga buena acogida...".

Pero Iñigo cuenta con el apoyo más importante, el de los lectores: "Sin el respaldo del público, estos proyectos un poco quijotescos no tienen sentido. Como dibujar es una actividad muy solitaria, agradezco un montón tener la ocasión de poder interactuar un poco con el público lector en ferias y salones. Uno se lleva muchas sorpresas, ya que se acercan lectores de superhéroes, pero también padres de familia, gente de la tercera edad... al final resulta que los fans son de todo menos homogéneos, y supongo que eso dice mucho del cómic, ya que gusta a gente muy diversa".

"Habrá nuevas aventuras cada dos años"

A pesar de las dificultades Iñigo continuará con la serie, aunque sea cada dos años: "Me temo que al actual ritmo de trabajo (del mi trabajo "de verdad", me refiero) no va a haber más remedio. Pero no tengo intención de dejar de dibujar aventuras de Ibéroes, salvo que bajen mucho las ventas, así que poco a poco, cada dos años, habrá una nueva aventura del grupo, con o sin editorial de por medio. El mejor y el peor piropo que pueden decirme son el mismo: "Me ha encantado, pero me deja con ganas de más. ¿Para cuándo el próximo?" 

Iñigo recomienda a los jóvenes autores que intentes autoeditarse aunque no sea en papel, como él: "Hay sistemas más baratos, desde luego. Existe la posibilidad de publicar las páginas una a una en Internet con una cierta cadencia, e ir sumando fans con cada nueva entrega. Así nacieron proyectos que luego han dado el salto al papel, como Eh Tío. Incluso la dición en papel puede salir económica si acudimos a una plataforma de "crowfunding" y permitimos que el público colabore económicamente sufragando una parte del coste de producción a cambio de originales, posters o de ver su nombre impreso en el cómic, como ha hecho Carlos Azaustre con el sexto número de sus Pardillos. ¡Las posibilidades son muchas!"

"Yo sin duda lo que recomiendo es ofrecer el producto a una editorial, y si esto no funciona, elegir entre publicarlo en web serializado, en versión iPad, o en edición impresa en régimen de crowfunding".

Iñigo nos avanza sus planes para futuros números: "Como en Día Libre hemos tenido sobredosis de nuevas caras, voy a intentar limitar un poco la presencia de nuevos personajes para los próximos números, pero sí va a asomar algún villano que ha aparecido brevemente en la primera aventura, como el Doctor Contubernio. El el número 3 sabremos más sobre La Presencia, esa especie de huevo frito gigante del número 2, o Tuntún, el tipo al que Viriato le roba los poderes, y en la boda de Andy Androide conoceremos a antiguos miembros del grupo. Ahora que lo pienso... al final va a ser que sí, que este tebeo está masificado..."

Esperaremos impacientes las nuevas aventuras de este grupo en el que el mayor superhéroe es su autor, Iñigo Aguirre.