Enrique Breccia: "Mi dibujo es expresionista y con grandes dosis de humor"
- El famoso dibujante argentino ha presentado la reedición de 'Avrack'
- Una de sus grandes obras junto al guionista Ricardo Barreiro
Considerado uno de los grandes de la historia del cómic, comenzó su carrera en 1968 junto a su padre, el genial Alberto Breccia, y Héctor G. Oesterheld adaptando al cómic la biografía del Che Guevara. También colaboró con su padre en dos obras cumbres del cómic mundial: Mort Cinder y El Eternauta. Luego se confirmaría como uno de los Grandes con obras como Alvar Mayor, El peregrino de las estrellas, Los viajes de Marco Polo o Lope de Aguirre, la aventura. El autor ha presentado en Barcelona la reedición de otro de sus grandes clásicos, Avrack (001 Ediciones), junto al guionista Ricardo Barreiro. Una obra fascinante, como todas las de sus autores, en la que se mezcla realismo mágico y aventura.
Un cómic que cuenta la historia de Jorge Pinedo, un aventurero que, tras una decepción amorosa decide suicidarse, saltando desde un acantilado. Pero unas misteriosas criaturas le transportan a un mundo extraño dándole la oportunidad de redimirse como un poderoso guerrero. Una obra llena de aventuras, surrealismo, acción, humor y los fabulosos dibujos de Breccia".
"Mi dibujo es, en cierto sentido, expresionista y con humor, con grandes dosis de humor ácido e irónico, intento que siempre aparezca la vena humorística en mis dibujos".
Le robaron los originales
"Con Avrak tengo sentimientos encontrados, porque no tengo ni un solo original de todos los que dibujé, ni de Alvar Mayor, ni de El peregrino de las estrellas... Nada y además hay un litigio sobre los derechos. Me los quieren quitar. Celebro que se vuelva a editar, pero me gustaría ser el dueño de los derechos. Es un litigio que dura ya muchos años".
"El cómic fue dibujado en una época muy difícil en Argentina, la de la dictadura, y el editor argentino se aprovechó de la circunstancia para quedarse con los originales que andan por el mundo, vendiéndose. Y yo soy absolutamente ajeno a todo eso. Desgraciadamente no es un caso único. No sé si hay muchos dibujantes que no tengan ni un solo original de aquella época. Yo no tengo ni una sola de las más de 8.000 páginas que dibuje por entonces, de Alvar Mayor, las historias cortas con Trillo y Saccomano...".
"Aún sí, fue una época que recuerdo con cariño porque dibujé grandes obras como esas o Avrack. No tanto por las circunstancias políticas".
"No aprendí a dibujar con mi padre"
Aunque parezca mentira, Enrique asegura que no aprendió a dibujar con su padre, Alberto, uno de los grandes del cómic mundial: "No aprendí a dibujar con mi padre. La primera vez que lo ví dibujar, yo tenía 22 años. El tenía un estudio fuera de casa y nunca lo ví dibujar. Además nunca tuve una opinión, ni a favor ni en contra, del estilo de mi padre. Debe ser por eso que tenemos estilos tan distintos, tanto mis dos hermanas como yo, respecto a el (Toda la familia dibuja)".
"Yo vengo de la pintura, del grabado en madera, así que no tengo referentes historietísticos. Me dediqué a la historieta simplemente por una cuestión económica, porque estaba recién casado y a punto de tener mi primer hijo. Fue en el 68, cuando hice la vida del Che en historieta, junto a mi padre, y donde se nota muchísimo la influencia del grabado en madera... blanco y negro puro y todo eso".
También ayudó a su padre en su versión de El Eternauta (el cómic más famoso de la historia de Argentina) junto al guionista Héctor Germán Oesterheld: "El Eternauta lo concebimos como una historieta experimental, en la parte técnica. Creo que en ese sentido fue una buena experiencia, pero visto ahora creo que le restó clima. Un clima que Solano López, con elementos mucho más clásicos hizo de una manera magistral. Creo que nuestra versión de El Eternauta es muy inferior a la de Solano López, en ese sentido. Es una obra que mantiene su vigencia pero yo prefiero la de Solano".
"Me gratifica que 50 años después sigamos hablando de El Eternauta, pero creo que es sobre todo por el guión más que por el dibujo de nuestra versión".
Sus proyectos
"En este momento estoy dibujando el cuarto tomo de Los Centinelas (Les Sentinelles) para la editorial francesa Delcourt, estoy terminando un libro de ilustraciones para la editorial Vicen Vives, de Cataluña, con 30 ilustraciones a color de Ciencia Ficción, y cuando acabe comenzaré con un álbum de Tex (El personaje más popular del cómic italiano) de 240 páginas".
"Además estoy preparando, para el próximo Salón del cómic de Lucca una gran muestra de mi trabajo, para una exposición antológica".
"Los Centinelas es un cómic con trasfondo histórico que transcurre en la Primera Guerra Mundial. Es un guión muy interesante porque el personaje es un científico francés reclutado para ir a la guerra, cuando en realidad es un pacifista. Entonces el gobierno lo transforma, después de una mutilación por una bomba, en el primer superhéroe francés, con brazos y piernas metálicos. Pero no es inmortal. Tiene una fuerza superior pero lo pueden matar. Pero lo que más me interesa del personaje es que es un pacifista obligado a luchar y matar. Es muy interesante".
"A Tex le aportaré mi estilo y mi visión de la historieta. Tex me interesa porque es un fenómeno que hay que explicar más desde el lado de la sociología que del de la historieta. Es un personaje que se ha mantenido durante muchísimo tiempo (1948) con un éxito sostenido y me interesa mucho hacerlo, es como un desafío".
Y no tiene miedo a enfrentarse a un western: "Soy un profesional y hago lo que me piden. Además, transcurre en escenarios que conozco muy bien, con grandes espacios abiertos, naturaleza, aventuras... un poco el cómic que he hecho siempre". Un poco como este fabuloso Avrack que tenemos la suerte de poder recuperar.