El sindicato UGT-Madrid se compromete a no aplicar la reforma laboral en el ERE a su plantilla
- Han convocado una huelga este jueves y el próximo 31 de mayo
- Piden que se retire el ERE que afecta a 36 de sus trabajadores
El sindicato UGT-Madrid se ha comprometido a no aplicar la reforma laboral aprobada por el actual Gobierno del PP en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 36 de sus trabajadores.
Los trabajadores de ese sindicato estaban llamados este jueves a secundar la primera de las jornadas de huelga convocadas en contra del ERE, así como una concentración en el exterior de su sede.
En un comunicado, UGT ha mostrado su intención de comportarse con "buena fe" para seguir el camino del diálogo con los trabajadores afectados por ese expediente.
"Realizaremos todos los esfuerzos posibles para alcanzar un acuerdo en la mesa de negociación abierta ya a tal fin", dice la nota del sindicato, que subraya el respeto a las jornadas de huelga convocadas: "entran dentro de la normalidad y del ejercicio de los derechos constitucionales".
Huelga contra el ERE
La Sección Sindical de UGT en Madrid ha convocado este jueves la primera de las jornadas de huelga "contra el incumplimiento del acuerdo alcanzado el 15 de febrero y la imposición de un ERE extintivo".
Los trabajadores de UGT exigen que la dirección del sindicato regional retire el ERE presentado el pasado 16 de mayo y aplique el Expediente de Regulación de Empleo Temporal pactado con la parte social.
Además del paro convocado , está prevista la convocatoria de una nueva huelga el próximo jueves, día 31, iniciativas con las que los trabajadores quieren que la dirección retire el ERE que presentó ante la autoridad laboral el pasado día 16.
Los representantes de los trabajadores han hecho pública otra nota en la que apuntan que los afectados por el ERE abarcan distintos departamentos de la empresa: abogados, administrativos, personal de servicios y técnicos y agregan que "la empresa, desde el registro del ERE, se ha negado a adoptar cualquier medida que no suponga despidos y reducción de plantilla".
También exigen buena fe en la negociación, pago puntual de los salarios, claridad en la información y documentación de la situación económica, "diálogo, no imposición" y la tutela de la Comisión Ejecutiva Confederal en todo el proceso.