Venus realiza su último tránsito ante el Sol del siglo
- El tránsito ayuda a los científicos a conocer mejor Venus
- El fenómeno no se repetirá hasta 2117
- Los países de Asia del Este y del Pacífico Occidental han tenido las mejores vistas
Venus se ha interpuesto entre el Sol y la Tierra dejando ver su silueta deslizarse lentamente sobre la superficie del astro rey, un fenómeno que ayudará a los científicos a recopilar datos sobre el tránsito de los planetas y que no se repetirá hasta 2117.
Tal y como estaba previsto, Venus apareció tímidamente como un pequeño lunar recorriendo el disco dorado solar ante los cientos de miradas de científicos y aficionados que le esperaban para seguir su trayecto que durará unas siete horas.
El fenómeno, retransmitido por la NASA en directo y que se pudo seguir en directo en RTVE.es, ha sido visto en casi todo el planeta excepto en África y gran parte de América del Sur. La mejor vista la han tenido los países de Asia del Este y del Pacífico Occidental, que han podido ver el recorrido completo. América del Norte, Centroamérica y el norte de América del Sur (Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela) pudieron ver el inicio en torno a las 22.03 GMT, antes del atardecer, mientras que la mayor parte de los países de Europa, Oriente Medio y Asia del Sur han visto la última etapa al amanecer del miércoles 6 de junio.
Este fenómeno, que se denomina tránsito planetario, tiene lugar cuando el Sol, Venus y la Tierra se alinean en ese orden, de forma que el planeta bloquea parte de la luz que emite la estrella, sin llegar a ser un eclipse ya que la porción que cubre es muy pequeña.
El Sol, Venus y la Tierra se alinean en raras ocasiones debido a que las órbitas alrededor del Sol de la Tierra y Venus están ligeramente inclinadas la una respecto a la otra y llegan a "desincronizarse", según explicó a Efe, Adriana Ocampo de la división de Ciencias Planetarias de la NASA.
El próximo, en 2117
Eso es lo que hace que sea un fenómeno poco frecuente que se ve dos veces seguidas cada siglo con una diferencia de ocho años entre uno y otro y no vuelve a repetirse hasta 105 años después. El último tránsito se produjo en junio de 2004 y el siguiente será en 2117.
Los tránsitos de Venus, considerados una "rareza astronómica", (desde que se inventó el telescopio se han registrado tránsitos en 1631, 1639; 1761, 1769; 1874, 1882 y 2004) han ayudado a los científicos en los últimos siglos a despejar algunas incógnitas la distancia de la Tierra al Sol y por tanto el tamaño del sistema solar, algo que cambió el concepto de la ciencia.
Los expertos aseguran que esta oportunidad es única para profundizar en datos como la temperatura y la presión de la densa atmósfera de Venus.
Los misterios de Venus
Venus tiene un tamaño similar a la Tierra y un mismo origen rocoso, sin embargo su evolución fue muy diferente y entre los misterios que oculta está saber por qué rota en sentido contrario al de los otros planetas.
Los telescopios de la NASA estarán apuntando a Venus, incluido el telescopio espacial Hubble, que usará la Luna como un espejo para evitar daños en su electrónica y verá la sombra de Venus reflejada en el satélite.
Durante toda la noche expertos de la NASA y otras instituciones científicas han seguido el movimiento de Venus, cuyo nombre se debe a la diosa romana del amor y que a lo largo de la historia ha cautivado a científicos como Galielo Galilei, que fue el primero en verlo a través del telescopio en 1610, al capitán James Cook, miembro de la expedición organizada en 1769 para ver su tránsito.